Un interno de la cárcel de Osorno fue sorprendido con un pollo asado que en su interior contenía distintos envoltorios con drogas y un cargador para celular.

Según lo informado por personal penitenciario, el hombre fue detenido por mantener elementos que fueron ocultos en la comida que le llevó su familia durante el horario de visita.

El comandante Rodrigo García Pezzo, alcaide del recinto carcerlario, fue por medio del trabajo efectuado con las cámaras de televigilancia donde advierten que un interno revisaba minuciosamente su alimento.

De esta manera, los gendarmes se dirigieron al lugar y pudieron advertir que al interior del pollo asado había droga, además de un cargador de celular.

Finalmente, se notificó a la Fiscalía respecto a la situación, para dar curso a las causas respectivas contra el responsable.

Gendarmería
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