La desoladora historia fue dada a conocer por la Fundación Cachupines Sin Hogar de Ovalle. El caso de "Peluchín" se asemejaría al reconocido filme del can japonés llamado “Hachiko”, quién también permaneció durante el resto de su vida expectante ante el posible retorno de su cuidador.
Durante la tarde de este martes, se viralizó en redes sociales la desgarradora historia de “Peluchín”. Un perro que quedó a la espera de su dueño, el cual murió la madrugada de ese día en La Serena, región de Coquimbo.
El compañero de “Peluchín” se quitó la vida, quedando el can desolado en las inmediaciones de la Avenida Pacífico en la ciudad.
Pese a que los vecinos del sector han tratado de ayudarlo, el perro se encuentra totalmente desconsolado ante la pérdida de su humano.
De hecho, los residentes han cooperado con “Peluchín”, entregándole comida y agua. Sin embargo, este no muestra intención de acercarse a otras personas más que a su cuidador.
Esta situación se asemeja a la del famoso filme del can japonés llamado “Hachiko”. Este perrito permaneció durante el resto de su vida expectante ante el posible retorno de su cuidador.
“Peluchín se reconoce por llorar”
Según informó El Día, la activista animalista que forma parte de la comunidad de Facebook “Manadas de Peluditos de Avenida Del Mar”, quien además recorre cotidianamente este sector, indicó que ya tenía conocimiento de la mascota.
“Eran dos perros muy tímidos que se encontraban deambulando por este lugar y que yo alimentaba frecuentemente, uno de ellos era ‘Peluchín’, el que hoy se reconoce por llorar”, explicó.
Así también, Kelsa Torres, una de las integrantes de la fundación ovallina Cachupines Sin Hogar, aseguró que este no es el primer caso registrado de una mascota muestra respeto a su cuidador fallecido manteniéndose a la espera de su regreso.
Hace unos años se enteró de la muerte de un hombre que fue atropellado en la ruta 45 de Ovalle. “Él era dueño de dos perros, de los cuales solo logramos dar en adopción a uno de ellos. El otro en cambio decidió mantenerse raudo en las cercanías del accidente, pese al intento de querer ayudarlo”, relató.
Falta de apoyo de las autoridades
Tras la viralización de la historia de “Peluchín”, es posible reflejar las problemáticas que existen en torno a la salud mental de las personas y a la tenencia responsable de mascotas en la ciudadanía.
Lo anterior, puesto que uno de los temas que más han dado que hablar es qué medidas pueden tomar las autoridades regionales ante estos hechos.
Para Fanny Keyer, activista animalista y socia-fundadora de la organización Conciencia Animal de La Serena, falta mayor apoyo gubernamental en estos hechos que relacionan a la salud mental de las personas y la tenencia responsable de los animales de compañía.
“El abandono de las instituciones, puede deberse a que no están aprovechando los fondos del Gobierno para invertir y ejercer la tenencia responsable de mascotas. Esto, ya que actualmente los animales se encuentran en un segundo, tercer y hasta en un cuarto plano”, expuso Keyer.
Asimismo, la activista animalista hizo hincapié en que no se debe menospreciar el abandono animal tras la muerte de sus cuidadores.
“Cuando una persona fallece, los familiares comienzan la repartición de bienes. Sin embargo, no existe una normativa legalque los obligue a hacerse cargo de las mascotas que quedan sin la presencia de su cuidador“, lamentó.
Finalmente, reiteró que las mascotas, “especialmente, las que están en una edad muy avanzada o padecen alguna enfermedad grave, tienen la probabilidad de que sean abandonadas en las calles”.
