El bloqueo de las rutas de acceso a las faenas de minera Los Pelambres lleva más de 15 días, tras el derrame de concentrado que se produjo a fines del mes de mayo. Desde la compañía han sostenido que, de mantenerse estas condiciones, se verán en la necesidad de tomar medidas como el término de contrato de algunas empresas contratistas.

Más de 15 días lleva el bloqueo de las rutas de acceso a las faenas de minera Los Pelambres, región de Coquimbo, por parte de un grupo de manifestantes de algunas de las localidades del valle Alto de Salamanca.

Esta acción se generó tras el derrame de concentrado que se produjo a fines del mes de mayo desde el concentraducto que atraviesa varias localidades de Choapa.

Si bien la empresa ya llegó a un acuerdo con los habitantes de Llimpo y realizó los trabajos de limpieza en el lugar afectado, un grupo de pobladores de otros sectores del valle se han movilizado para presentar una serie de demandas, sobre todo en lo concerniente en la situación medioambiental.

El conflicto ha provocado cortes de caminos que impiden el normal funcionamiento de las faenas, debido a la dificultad de acceder por parte de los trabajadores y el traslado de abastecimientos necesarios para su operatividad.

La compañía ha sostenido que, de mantenerse en estas condiciones, se verán en la necesidad de tomar medidas como el término de contrato de algunas empresas contratistas, aduciendo problemas de fuerza mayor.

En este contexto, los representantes de los sindicatos de Planta, Supervisores y de los trabajadores de las empresas colaboradoras de MLP se reunieron con la seremi del Trabajo para exponer la situación.

Ante este futuro incierto, los trabajadores hacen un llamado al diálogo entre todos los involucrados y expresan que ellos también puedan plantear su posición en estas mesas de diálogo integradas por autoridades, manifestantes y representantes de MLP.

Paralización de operaciones en minera Los Pelambres

Al respecto, Waldo Pérez, presidente Sindicato de Supervisores de MLP, manifestó que la paralización de la actividad es inminente, ya que en estos días se está racionando la alimentación de los trabajadores que están arriba en la faena y, al no tener acceso terrestre, no se puede llegar con recursos básicos como alimentación, combustibles e insumos propios de la operación minera.

Pérez explica que no sólo son los trabajadores los afectados, sino también las pequeñas empresas que directa e indirectamente dependen de la compañía y sus trabajadores. Es decir, correspondería a unas 100 mil personas impactadas ante un posible cierre.

“No solamente son los trabajadores de MLP los que están afectados, sino que también los emprendedores de los rubros de alimentación y hotelería de la zona, que están sufriendo el impacto económico de la paralización”, señaló.

El dirigente dice que, si bien se está haciendo un puente aéreo para trasladar a los trabajadores, esto es una dotación reducida, pues opera sólo con un 30% de los trabajadores.

En ese contexto, el representante de los supervisores sostiene que otros insumos como combustible y explosivos, indispensables para la explotación minera, deben ser trasladados en forma terrestre, por lo que ha sido imposible de abastecer en estos días.

Temor a pérdida de empleos tras 15 días de manifestaciones

La preocupación de una eventual reducción de personal, e incluso la paralización total, es compartida por los casi 8 mil trabajadores de empresas contratistas. Así lo afirma Christian Madrid, presidente Federación N1 de Empresas colaboradoras de Minera Los Pelambres, quien señala que están inquietos por el riesgo de perder sus puestos de trabajo ante la prolongación del conflicto.

“Estamos con turno reducido, hay un porcentaje mínimo de trabajadores contratistas laborando, la mayoría está en sus casas esperando por una solución”, sostuvo.

Madrid afirma que ya existen cartas de aviso de suspensión parcial enviadas por la empresa, por lo que el futuro de los contratistas es incierto.

El representante de los colaboradores de MLP aclara que ellos coinciden en algunas de las peticiones de los pobladores de la comunidad movilizados, pero no quieren ser perjudicados al perder sus trabajos.

“Se debe recordar que parte importante de estas comunidades son trabajadores de minera Los Pelambres, ya sea de la empresa o contratista, por lo mismo, buscamos una solución permanente, esto para el bien de la comunidad, trabajadores y la compañía. Nosotros sabemos que somos parte del conflicto, pero queremos también ser parte de la solución”, aseveró.

Los diversos representantes de los sindicatos de trabajadores coinciden que, en el escenario económico actual, la pérdida de esta cantidad de empleos sería un golpe no sólo a la economía regional, sino nacional.

Diálogo con el Gobierno por situación en Los Pelambres

Ante este escenario, la seremi del Trabajo, Claudia Santander, manifestó que este conflicto va a impactar en los trabajadores y principalmente a los de las empresas contratistas, a las cuales se quieren cerrar o suspender los contratos.

El delegado presidencial regional de Coquimbo, Rubén Quezada, se trasladó hasta la provincia de Choapa para encabezar una mesa de diálogo entre la comunidad y la empresa minera, con el objetivo de acercar posiciones.

Quezada señaló que, si bien se logró dar resolución al problema en la localidad de Llimpo, se generaron otros focos de conflicto. Esto levantó demandas a lo largo de distintos sectores del valle del Choapa, las que ahora se deben abordar en esta mesa.

“Esperamos que este trabajo coordinado e integral pueda dar frutos y por lo mismo, personalmente acompaño a este equipo para intentar aunar las voluntades faltantes”, finalizó.