Tras la implementación del Decreto de Ley 701 (DL701), el bosque nativo paulatinamente comenzó a desaparecer en medio de acusaciones de talas ilegales e incendios sospechosos. Actualmente es una normativa que, según algunos, "no se usa hace 20 años" pero que de todos modos sigue vigente.
La polémica la desató esta semana nuestro presidente Gabriel Boric, quien -en una visita a la Macrozona Sur- llamó a derogar el Decreto de Ley 701.
“Tenemos que hacernos cargo de ese conflicto (…) ello implica derogar el decreto de ley 701, fortalecer la institucionalidad y proponer nuevos instrumentos de fomento para la conservación y el manejo de bosque nativo y plantaciones”, dijo Boric.
A raíz de esto es que desde la empresa Arauco se respondió al Presidente que esta normativa “no se usa hace más de 20 años”.
Con estas declaraciones es que la compañía hizo resurgir el debate de un royalty para la industria forestal, el cual hermanecer pendiente desde hace años.
Pero, ¿qué es exactamente el Decreto de Ley 701?
En pocas palabras, el decreto permite que el Estado entregue una bonificación a las empresas forestales para fomentar la plantación de árboles.
Pese a esto, finalmente los recursos sirven para las grandes empresas que hasta el día de hoy exportan millones de dólares en productos madereros.
Cabe destacar además que se trata de un cuerpo legal que nació en 1974.
Tras el golpe de Estado que encabezó Pinochet se empezó a elaborar políticas tendientes a levantar la economía chilena, por lo que en octubre de 1974 se dictó el Decreto Ley 701 (DL701).
¿Qué es el Decreto 701?
Se trata de una normativa que vio la luz en la década de los 70 para impulsar el desarrollo forestal de Chile.
Según lo detalló la Corporación Nacional Forestal (Conaf) para este efecto se establecen los siguientes “incentivos” a la actividad forestal:
– Bonificación para la forestación o estabilización de dunas en suelos de aptitud preferentemente forestal.
– Beneficio tributarios para realizar actividades de administración y manejo de bosques plantados en terrenos de aptitud preferentemente forestal.
Posteriormente, en 1998 se dictó la ley número 19.561 que modificó la normativa 701, donde se incentiva la forestación de pequeños propietarios y las prácticas de recuperación de suelos.
Según lo detalló Conaf, esta modificación legal incorpora dos tipos de incentivos:
– Bonificación a pequeños propietarios para realizar actividades de forestación y manejo de bosques plantados en suelos de aptitud preferentemente forestal.
– Bonificación para realizar actividades de forestación, recuperación de suelos y/o estabilización de dunas en suelos frágiles, degradados, o suelos degradados con pendientes superiores al 100%.
Cronología del decreto
Según lo detalló BioBioChile, pese a los reparos, en 1998 Eduardo Frei prorrogó el Decreto 701 por 15 años más.
Con esto se incorporó además un tramo retroactivo desde el 1 de enero de 1996 (Ley 19.561), donde se reformula la ley para direccionar el beneficio a pequeños y medianos productores.
Doce años más tarde, Sebastián Piñera renovó el DL 701 por dos años (Ley 20.488) para luego, en octubre de 2012, enviar al Congreso un Proyecto de Ley para extender por 20 años el subsidio.
Si bien la iniciativa pasó sin mayores problemas por la Cámara, quedó entrampada en las comisiones unidas de Agricultura y Medio Ambiente del Senado.
Fue allí donde recibió 506 indicaciones, deteniendo su tramitación y quedando pendiente de forma indefinida.
Actualmente, es uno de los tantos proyectos que “duermen plácidamente” en el Congreso.
No obstante, en su primera cuenta pública de su segundo mandato, el 21 de mayo de 2014, Michelle Bachelet anunció la prórroga del DL 701, justificando su decisión en la Contribución Nacional (INDC) de Chile a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
En otras palabras, plantar árboles para generar más aire limpio.
