El presidente Gabriel Boric participó de su primer Te Deum Evangélico de su mandato, que se realizó este sábado en la Catedral Evangélica de Puente Alto. La ceremonia estuvo marcada por el llamado a la unidad que hizo el obispo Edmundo Zenteno. “Es necesario cruzar la calle, conversar, no como adversarios, somos hermanos chilenos”, dijo el religioso.

Este sábado se desarrolló el tradicional Te Deum Evangélico, en el marco de las Fiestas Patrias, ceremonia en la que el principal invitado fue el presidente Gabriel Boric.

Se trató de una ceremonia religiosa realizada esta vez en la Catedral Evangélica de Puente Alto, y que fue dirigida por el obispo de la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile, Edmundo Zenteno.

En la oportunidad, este último aseguró que “es necesario cruzar la calle, conversar, no como adversarios, somos hermanos chilenos”.

“El país reclama soluciones y las soluciones no están solamente en un lado, están en todos los lados, tenemos que cambiar este espíritu y forma de sentirnos adversarios o enemigos”, pidió.

“Ruego a Dios para que sigamos orando por nuestra patria, para que encontremos caminos de encuentro, somos hermanos, nos une una bandera, un territorio, una historia, pero queremos lo mejor para todos”, sostuvo.

Gobierno valoró llamado a la unidad durante Te Deum

El presidente Boric acudió al Te Deum Evangélico junto a otras autoridades de Gobierno, como la ministra del Interior, Carolina Tohá, y la ministra vocera de La Moneda, Camila Vallejo.

Esta última valoró el llamado a la unidad, destacando además una de las alabanzas que se entonó: “Firmes y Adelantes”.

Una apreciación similar tuvo el presidente del Senado, Álvaro Elizalde, quien dijo que pese a las diferencias, todos somos parte de un mismo país, resaltando la contribución de la iglesia evangélica a la nación.

El alcalde de Puente Alto, Germán Codina, también resaltó el llamado desde el mundo evangélico a la unidad.

El presidente Gabriel Boric, en tanto, no entregó declaraciones a los medios de comunicación que estaban apostados en las afueras del templo, debido a que no se permitió su ingreso.