Los diputados independientes del PPD estarían analizando su salida oficial de la bancada, lo que llevaría a la conformación de una nueva fuerza independiente en el Congreso Nacional. Esto dejaría al presidente de la Cámara Baja, Raúl Soto, la exministra de Salud, Helia Molina, y la jefa de bancada, Carolina Marzán, sin bancada y en la búsqueda de un acople en otras fuerzas.
Los parlamentarios independientes de la bancada del PPD, sostendrían una conversación clave esta tarde con el ministro de la Segpres, Giorgio Jackson, mientras analizan una salida oficial de la bancada, la que podría terminar con la conformación de una nueva fuerza independiente en el Congreso Nacional.
Fuentes de La Radio aseguraron que los diputados Héctor Ulloa, René Alinco, Carlos Bianchi, Jaime Araya, Cristian Tapia y Marta González, ya comunicaron su voluntad de salir de la bancada, y hasta crearon un grupo de WhatsApp para iniciar la coordinación.
Sin embargo, durante esta jornada los diputados PPD que sí son militantes, han buscado bajar la temperatura de una decisión que por estos días ya parecía tomada.
Conformación de una nueva fuerza independiente
Incluso, ya existe un diseño para que otros parlamentarios independientes de otras fuerzas políticas puedan terminar uniéndose a una bancada independiente, que se conformaría con 9 integrantes.
Esto dejaría al presidente de la Cámara Baja, Raúl Soto, la exministra de Salud, Helia Molina, y la jefa de bancada, Carolina Marzán, sin bancada y en la búsqueda de un acople en otras fuerzas.
El desgaste de los parlamentarios ha sido paulatino, pero la molestia final ocurrió con la decisión del presidente Gabriel Boric de solo invitar militantes el miércoles pasado a una cena en Cerro Castillo, de la que fueron excluidos los diputados independientes.
Los casos de Jaime Araya y Cristian Tapia son particulares. Los diputados integraron la bancada por el quinto retiro, y actualmente forman parte de la bancada transversal de la macrozona norte.
De hecho, Araya volverá a votar en contra del Estado de Excepción en La Araucanía y el Bío Bío, en señal de protesta con la decisión del gobierno de no implementar la medida en la zona.
El efecto en el acuerdo administrativo
Cabe mencionar que hace varias semanas el acuerdo administrativo que permitió la presidencia de Raúl Soto está en entredicho.
Esto, ya que hay un capítulo abierto sobre la figura de la diputada comunista, Karol Cariola, que genera resistencia en una serie de fuerzas. Y se proyecta que tanto ganando el Apruebo como el Rechazo, habría razones para que el PC no sea el partido adecuado para conducir la mesa.
Hasta el momento ese acuerdo no está roto, pero este potencial quiebre del PPD sería otra trizadura más.
Lo anterior, porque los parlamentarios que saldrían para reacomodarse políticamente, buscarían partir de cero con el acuerdo administrativo, y no se sentirían obligados a honrar los cupos de una bancada a la que ya no pertenecen.
Esto también está en evaluación. Por ejemplo, el diputado independiente Carlos Bianchi buscaría mantener su posición en la Comisión de Hacienda, recordando que integrando el PPD alcanzó ese cupo.
La figura de Raúl Soto también es observada de cerca, con el largo rumor instalado de que estaría por tratar de mantenerse en la presidencia de la corporación.
Hay quienes evalúan que a largo plazo, la división de fuerzas podría dar pie a que Soto sea instrumental en un nuevo acuerdo, que incluya más protagónicamente a fuerzas intermedias como el Partido de la Gente, y que mire de reojo hacia la oposición.
Finalmente, esta tarde habrá conversaciones clave con el ministro de la Segpres, Giorgio Jackson, que podrían retrasar esta decisión, acelerarla, o derechamente terminar con una división que podría rearmar el puzzle de las fuerzas políticas en el Congreso.
