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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El presidente de Estudiantes de La Plata, Javier Milei, generó revuelo en redes tras su mensaje "EdeLP! Fin." luego de consagrarse en el Trofeo de Campeones ante Platense. El gesto fue interpretado como un posicionamiento político en medio de la tensa relación entre el club y la Asociación del Fútbol Argentino, marcada por diferencias sobre la gestión del fútbol y el rol del Estado.

Estudiantes de La Plata volvió a rugir, pero esta vez en San Nicolás: Platense empezó ganando el Trofeo de Campeones 2025, pero de la mano de Lucas Alario por duplicado, El Pincha lo dio vuelta y logró su decimonovena estrella.

El ‘Calamar’, dominador del duelo en la primera mitad, hizo valer la ley del ex y se adelantó con gol de Franco Zapiola. No fue hasta cerca del final, ya como una tónica, que el club presidido por Juan Sebastián Verón lució su chapa.

Con un doblete de Lucas Alario, que anotó el empate a diez minutos del final y en los descuentos convirtió el tanto del triunfo.

Así, Estudiantes de La Plata otra vez se consagró en el fútbol argentino, confirmando su gran momento que lo tiene como campeón del Torneo de Clausura tras haber vencido a Racing por penales la semana pasada.

Luego de la consagración de Estudiantes de La Plata ante Platense en el Trofeo de Campeones, el presidente de Argentina, Javier Milei, publicó un breve mensaje en su cuenta oficial de X que rápidamente generó repercusión.

“EdeLP! Fin.”, escribió el mandatario, sin mayores precisiones, aunque el contexto institucional del fútbol argentino le otorgó al posteo un significado que fue más allá de la simple felicitación deportiva.

El mensaje fue interpretado por distintos sectores como algo más que un saludo circunstancial.

Estudiantes es considerado desde hace tiempo uno de los clubes que mantiene una postura crítica y autónoma frente a la conducción de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), en un escenario marcado por la disputa abierta entre el Gobierno trasandino y la entidad que regula el fútbol local.

La relación entre la administración de Milei y la AFA atraviesa un período de tensión, con cruces indirectos, diferencias públicas y debates sobre el rol del Estado, la transparencia y el modelo de gestión del fútbol argentino.