Juan Pablo Letelier, Fidel Espinoza y Arturo Barrios serían las principales cartas del Partido Socialista que buscarán asumir la testera de la colectividad. Militantes consultados dijeron que durante la próxima elección interna -que se realizará a finales de marzo- se jugarán la supervivencia y apuntaron a reencontrarse con los movimientos sociales.

Luego de un año electoral, las definiciones políticas continúan. Lo anterior, porque diversos partidos tendrán elecciones internas, renovando así sus dirigencias. Uno de ellos es el Partido Socialista, tienda encabezada desde 2017 por el senador y ex ministro Álvaro Elizalde.

Desde ya suenan algunos nombres, como el del senador Juan Pablo Letelier, el diputado Fidel Espinoza y el ex subsecretario de turismo, Arturo Barrios. Mientras, hay quienes observan una oportunidad de renovación, pues existen críticas al interior de la tienda.

El senador Juan Pablo Letlier señaló en entrevista con El Mercurio que el PS no se puso al día, se gubernamentalizó y debilitó con los movimientos sociales.

El diputado socialista Leonardo Soto afirmó que en los próximos meses la entidad enfrentará importantes retos y su propia sobrevivencia.

“El Partido Socialista en los próximos meses se juega su supervivencia. Tiene la enorme necesidad de enfrentar varios desafíos, que son, primero, elegir una directiva nueva con liderazgos nuevos para los socialistas y también para la sociedad, que sean capaces de actualizar su proyecto político, social y económico y conectarlo con las luchas de esta época”, sostuvo.

Renovación, autocrítica e identidad son algunos de los aspectos que debieran primar, según señalan desde el partido. Más aún cuando el PS debiera tener un rol clave en el gobierno de Gabriel Boric. El diputado Juan Luis Castro dijo que su partido enfrentará estos desafíos.

“El Partido Socialista tiene dos tareas fundamentales en el próximo periodo. Uno es renovar su dirigencia y sus cuadros, poniéndose al tono de los desafíos de hoy, haciendo una autocrítica razonable de los errores cometidos en el pasado y particularmente tener una identidad propia de lo que ha sido el socialismo en Chile”, indicó.

Por su parte, el diputado Jaime Naranjo fue crítico con la actual administración y aseguró que la tienda debiera reencontrarse con los movimientos sociales.

“Los desafíos que tiene el Partido Socialista, es cómo un partido que se había acostumbrado a trabajar desde el Estado, vuelve a los territorios que ha estado bastante lejano en las últimas dirigencias del Partido Socialista. Si el Partido Socialista mantiene este divorcio con las organizaciones sociales, su futuro no es de lo mejor”, declaró.

Durante esta semana, la dirigencia socialista se reunirá con el presidente electo Gabriel Boric para conversar sobre futuros desafíos. Sin embargo, será a finales de marzo cuando los socialistas deban definir a su próximo liderazgo.