La Corporación Nacional del Cáncer (Conac) ha expresado su “profundo pesar” por el reciente fallecimiento del director y ex vicepresidente de la institución, el Dr. Rodrigo Prado Buzeta.

El Dr. Prado, además, tuvo un destacado desempeño académico, retirándose de esa labor desde el 2009, siendo fundador del Centro de Oncología Preventiva de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile.

Igualmente trabajó para la Organización Panamericana de la Salud (OPS), donde en 1968 fue nombrado experto en la detección y prevención del cáncer cérvico uterino.

Tras ello, a su regreso a Chile creó el Laboratorio del Citopatología y Control del Cáncer en el Hospital del Salvador, con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud, lo cual dio el inicio a la red de laboratorios en todo el país para la realización del test diagnóstico de cáncer cérvico uterino, sentando las bases de lo que sería el futuro programa de pesquisa y control del cáncer cérvico uterino.

Catalina Agosin R, presidenta de la Conac, expresó en una declaración que el médico ingresó “a la Corporación Nacional del Cáncer en 1985, dando un significativo impulso a labores preventivas y cooperando con el proyecto de creación de Unidad Ginecológica móvil, destacando en esta área el Programa de Evaluación de Incidencia de Cáncer de Cuello Uterino en Población Chilena”.

Dicho programa fue financiado por la OPS y “permitió la obtención de información fidedigna utilizada por el Ministerio de Salud en la elaboración de nuevas políticas de salud en la mujer, permitiendo el aumento de cobertura PAP en población de alto riesgo, normativa vigente hasta esta fecha”, añadió Agosin.

Y recalcó que “el Dr. Prado fue un vivo ejemplo digno de seguir en su compromiso con su hermosa familia, la universidad y con nuestra organización. En nombre suyo y de cada uno de los integrantes de Conac, hemos expresado nuestras condolencias a la familia con profundo sentimiento de pesar”.

A continuación puedes leer la declaración completa de Catalina Agosin R, presidenta de la Conac, por el sensible fallecimiento del Dr. Prado.

Fallece destacado Dr. Rodrigo Prado, impulsor de nuevas políticas de salud en la mujer chilena.

Con profundo pesar informamos el sensible fallecimiento de nuestro Director y Ex-vicepresidente de la Institución Dr. Rodrigo Prado Buzeta (QEPD).

EL Dr. Prado destacadísimo académico de nuestro país, retirado de la labor académica desde el 2009, fue fundador del Centro de Oncología Preventiva de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile.

El doctor Prado se formó en la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile y, posteriormente, realizó estudios en Estados Unidos y Canadá, donde conoció los secretos de la oncología ginecológica y patología cervical, así como la importancia del diagnóstico temprano en materia de cáncer cérvico uterino. En 1968 fue nombrado experto en la detección y prevención de esta enfermedad por la Organización Panamericana de la Salud, OPS.

A su regreso a Chile creó el Laboratorio del Citopatología y Control del Cáncer en el Hospital del Salvador, con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud, lo cual dio el inicio a la red de laboratorios en todo el país para la realización del test diagnóstico de esta enfermedad, sentando las bases de lo que sería el futuro programa de pesquisa y control del cáncer cérvico uterino. En el 2001, y junto al doctor José Manuel Ojeda, creó el Centro de Oncología Preventiva, radicado en el Campus Occidente de la Facultad de Medicina el que es, hasta hoy, centro de referencia nacional en el examen de Papanicolau.

Durante su labor académica y asistencial contribuyó a la formación de especialistas y profesionales de laboratorio, quienes aportan a la prevención, diagnóstico y tratamiento del cáncer cérvico uterino a lo largo de todo el país.

Ingresa a la Corporación Nacional del Cáncer en 1985, dando un significativo impulso a labores preventivas y cooperando con el proyecto de creación de Unidad Ginecológica móvil, destacando en esta área el Programa de Evaluación de Incidencia de Cáncer de Cuello Uterino en Población Chilena, financiado por la Organización Panamericana de la Salud y que permitió la obtención de información fidedigna utilizada por el Ministerio de Salud en la elaboración de nuevas políticas de salud en la mujer, permitiendo el aumento de cobertura PAP en población de alto riesgo, normativa vigente hasta esta fecha

Lo expuesto, es sin lugar a dudas, una importante contribución del Dr. Prado a la salud de nuestro país y es comparable a las cualidades como esposo, padre y abuelo, pero especialmente por sus notables condiciones humanitarias de respeto y consideración a quienes tuvimos la suerte de conocerlo. Fue un gran persona, dotada de inteligencia, valores, compromiso, lealtad y misericordia con quienes tanto lo respetaron y admiraron.

El Dr. Prado fue un vivo ejemplo digno de seguir en su compromiso con su hermosa familia, la Universidad y con nuestra Organización.

En nombre suyo y de cada uno de los integrantes de Conac hemos expresado nuestras condolencias a la familia con profundo sentimiento de pesar

Le saluda atentamente,

Catalina Agosin R, Presidenta de la Corporación Nacional del Cáncer.