En su estudio “Coronavirus en Chile” de marzo, la consultora Ipsos recabó información relacionada con la pandemia en el país.
Los resultados del sondeo arrojaron que uno de cada diez chilenos no se vacunará contra la covid-19, pese a que los productos de Sinovac y Pfizer/BioNTech están autorizados por el ISP.
En tanto, un 11% de los entrevistados afirmó que todavía no decide si se vacunará o no, 21% dijo que ya se vacunó y 58% está esperando hacerlo.
En tanto, un 79% de los consultados dijo sentir algún nivel de orgullo en el proceso de inoculación sustanciado por Chile. Sin embargo, un 16% indicó no sentirse “nada orgulloso” con la iniciativa.
Sumado a lo anterior, un 49% de los encuestados sostuvo que la vacuna no bajará la cantidad de contagios.
Camino a la normalidad
Este estudio de Ipsos también arrojó que, pese a que existe confianza en la vacuna, no todos los chilenos pretenden volver a realizar actividades normales de inmediato.
Ejemplo de ello es que el 53% de los chilenos esperaría más de un año para salir de casa sin mascarilla, pese a haberse vacunado con ambas dosis.
Por otro lado, siempre después de haber recibido ambas dosis, un 22% esperaría entre uno y tres meses para usar transporte público, un 34% tomaría el mismo periodo para comprar en centros comerciales y un 41% tomaría hasta seis meses para salir de vacaciones en el país.
Respecto a este último punto, un 9% comentó que viajaría “inmediatamente después de vacunarse” y un 13% señaló que no ha dejado de hacerlo.
Con respecto a viajes al extranjero, un 45% de los encuestados esperaría más de un año para salir del país con fines turísticos.
Pero un 6% lo haría inmediatamente después de vacunarse. Un 9% respondió que no ha dejado de hacerlo.
Vacunas sobrantes
En el mundo, hace más de una semana que Chile lidera la vacunación por cada 100 habitantes, de acuerdo a datos de la plataforma Our World in Data de Oxford.
Además, en América Latina, Chile es uno de los países con más vacunas aseguradas. Ya en septiembre de 2020, el Gobierno anunciaba acuerdos que nos darían acceso a 32,4 millones de dosis.
Por ello, y ante la eventualidad que una vez concluido el proceso Chile disponga de dosis suficientes de vacuna para toda la población, Ipsos le preguntó a los participantes del estudio qué debería ocurrir con las sobrantes.
Un 44% respondió que el país debería ceder algunas de sus dosis extra para que la utilicen otros países.
No obstante, un 48% decidió que Chile debería conservar todas sus dosis sobrantes de la vacuna por si las necesita en el futuro.
Un 8% de los encuestados no supo qué responder ante esta pregunta.
En una comparativa global, Chile quedó en el puesto 10 del listado con países dispuestos a donar dosis. Sin embargo, también fue la nación donde más gente se opuso a esta idea.