Por 24 votos a favor, ocho en contra y dos abstenciones, la Sala del Senado aprobó un proyecto de acuerdo impulsado por la oposición para que el Presidente declare desierta la licitación del Instituto de Tecnologías Limpias (ITL) —región de Antofagasta—.

La iniciativa fue ingresada tras críticas que se generaron debido a que la adjudicación llevada a cabo por la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) se entregó a un consorcio estadounidense, dejando fuera a las principales universidades nacionales.

En la votación algunos senadores oficialistas aprobaron este proyecto de acuerdo, como por ejemplo, el senador y presidente de Renovación Nacional, Rafael Prohens; el senador Juan Castro (RN); y Manuel José Ossandón (RN).

En la abstención se sumaron los senadores Francisco Chahuán (RN) y también Kenneth Pugh (RN).

Recurso de reposición

Las Universidades de Antofagasta, U. de Chile, U. de Concepción, U. Católica, entre otras, que integran la Asociación para el Desarrollo del Instituto de Tecnologías Limpias (Asdit), consorcio que obtuvo 0.03 puntos menos que Associated Universities Inc (AUI), en el proceso de licitación de Corfo para desarrollar el Instituto de Tecnologías Limpias (ITL), presentaron un recurso de reposición y jerárquico ante Corfo con el objetivo de que se reevalúen las propuestas, en vista de que se detectaron errores en los antecedentes con los cuales se desarrollaron las evaluaciones y puntajes finales.

Dentro de los cuestionamientos se recalca que se evalúe con la misma calificación a ambos consorcios siendo que Asdit cuenta con una participación mayor de planteles chilenos, como la U. Católica del Norte, U. de Antofagasta, U. de Chile, U. de Santiago, U. de Concepción, entre otras, un número significativo de empresas mineras y de energía e institutos de investigación internacionales.

En tanto, la AUI cuenta con la participación de tres planteles privados del país y un número menor de instituciones relacionadas al área. Asimismo, en cuanto a quienes componen ambos grupos, obtienen la misma puntuación siendo que la opción de AUI tiene solamente un mandante, lo que implicaría modificar su gobernanza. A pesar de estos cuestionamientos, en estos y otros ítems, ambas propuestas tienen la misma calificación.

De esta forma la decisión de Corfo, ha sido cuestionada por la Asdit en cuanto a su transparencia, plazos, y porque durante la evaluación de los proyectos se habría entregado a la comisión evaluadora información parcial respecto a la infraestructura de investigación comprometida por cada una de las propuestas, a las entidades que comprometían recursos y a los presupuestos.

Razón por la que el consorcio de universidades Asdit informó que, con el fin de que se revalúen las propuestas en vista de que detectaron errores en los antecedentes con los cuales se desarrollaron las evaluaciones y puntajes finales, presentó dicho recurso que busca revaluar la adjudicación y, eventualmente, revertir el resultado.

“Del acta de la sesión y de informaciones emanadas de la misma Corfo, se puede acreditar que los consejeros participantes de la sesión del 4 de enero actuaron sobre la base de información imprecisa, parcial o incorrecta”, señalan los firmantes del recurso Álvaro Restuccia, de la Universidad de Antofagasta; Alejandro Bouchon, de la Pontificia Universidad Católica de Chile y René Jofré, de la Universidad de Chile, en representación de Asdit.

Además, en el texto, Asdit apunta a una serie de errores en el proceso de evaluación: “El proceso se llevó con máximo secreto. En una situación fuera de todo estándar las propuestas postulantes no fueron presentadas ante la Comisión Evaluadora ni el Consejo de Corfo, habiéndose solicitado en más de una oportunidad. En una convocatoria de US$193 millones, esto es inexplicable y alimenta la sospecha que no se quería confrontar las propuestas para no complicar una decisión que estaba tomada con antelación o fuera del marco de la convocatoria”, señalan.