Preocupación ha causado este año el aumento de personas que han ingresado de forma clandestina al territorio nacional, sobretodo en las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá.
Pese a que los flujos migratorios hacia Chile han disminuido en relación al año pasado, se han incrementado los ingresos irregulares en el país; particularmente en el sector de Colchane.
Según cifras que maneja el Servicio Jesuita de Migrantes (SJM), entre enero 2018 y septiembre 2020 se concentra el 61% de los notificados desde 2010.
Ante esta situación, el alcalde de la ciudad de Arica, Gerardo Espíndola señaló que se espera un masivo ingreso por la zona costera del país, debido a que actualmente por el lado del altiplano las condiciones climáticas han empeorado.
Por su parte, el alcalde de Alto Hospicio, Patricio Ferreira indicó que esta inmigración masiva compromete aún más la situación sanitaria que enfrenta el país.
Se destaca el gran flujo de personas venezolanas que han ingresado al país en comparación a otros años, pasando de ser 9 en 2017 a 4.226 en 2020, lo cual constituye a un 72% de los registros totales de ingresos por paso no habilitado.
En este sentido, el secretario de la Asociación Venezolana en Chile, Carlos Carrasco señaló que las autoridades nacionales no entienden el contexto de la migración venezolana.
También preocupa la alta cantidad de niños que migran al país, siendo un total de 2.359 menores ingresados, según cifras entregadas por Carabineros.
