En la Cámara de Diputados se tramitan distintos proyectos de ley que pudieron haber sido presentados por los propios parlamentarios o bien por el presidente de la República de turno, únicos actores que pueden realizar esa acción de acuerdo a la Constitución.

Precisamente los diputados Tomás Hirsch del Partido Humanista y su par de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Guillermo Ramírez, ejercieron esa facultad que les otorga la Carta Fundamental y presentaron una moción parlamentaria con el fin de terminar con la presentación de los denominados proyectos inútiles, detalla Las Últimas Noticias.

Estos últimos proyectos, ejemplificaron los diputados, son aquellos que buscan establecer el “día de” o autorizar la construcción de uno o varios monumentos para alguna figura pública, detalla el matutino.

Por ejemplo, consigna el mismo medio, el año pasado ingresó a trámite un proyecto que buscaba establecer cada 9 de noviembre como el Día Nacional del Taca-Taca o Fútbol de Mesa.

A juicio de Hirsch y Ramírez, ese tipo de proyectos lo único que producen es que otras iniciativas de mayor importancia catalogadas como estructurales demoren más su trámite legislativo en la Cámara. Por esa razón proponen que ese tipo de situaciones como declarar el día nacional de algo o erigir un monumento se tramiten en los gobiernos regionales o en los municipios según corresponda.

“(…) de esa manera liberamos tiempo para legislar que son de real importancia a nivel nacional. Estamos preocupados por la calidad de las discusiones que estamos teniendo, a qué dedicamos las horas, sobre qué hacemos los estudios. Queremos que el tiempo que estamos en Valparaíso se aproveche para las urgencias sociales y lo que de verdad a la gente le importa”, explica el diputado Ramírez.

En esa misma línea, su colega humanista añade que “el Congreso es una institución que se rige por formas obsoletas. Queremos un Parlamento más ágil. Hay muchos proyectos de interés para la ciudadanía que se demoran años en ser ley”.

En resumen, el proyecto de los legisladores no pretende terminar con la declaración de los “días de…”, ni menos evitar la construcción de monumentos o estatuas, sino que esas situaciones no tengan que votarse en el Congreso y así poder darme más agilidad a otras iniciativas.