Si bien ha sido en el proyecto de convivencia escolar -ex Aula Segura- donde el Ministerio de Educación ha puesto todos sus esfuerzos, estas últimas semanas se despertó una controversia por el exiguo crecimiento del presupuesto en educación superior, que el Mineduc ha intentado evadir, pese a que se han ido sumando más detractores.
A las críticas del Consorcio de Universidades del Estado, que alega un déficit de 18 mil millones de pesos para los 18 planteles, se suma el “fuego amigo” de los cuestionamientos de la senadora de la UDI Ena von Baer, quien emplazó al Gobierno a respetar el acuerdo que alcanzaron con la administración anterior por las becas Bicentenario y no dejar fuera del beneficio a más de 14 mil estudiantes de planteles privados sin gratuidad.
Ahora fue el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, quien sumó cuestionamientos al Ejecutivo por el presupuesto, acusando falta de apoyo para las instituciones que conforman el G9 y asegurando que se siente “frustrado” por los esfuerzos de la administración pasada y la presente.
“Ese apoyo no se vio en el gobierno anterior y nosotros esperábamos que en este cambio de conducción del ministerio pudiera haber una presencia, un gesto nuevo, y tampoco lo hemos visto, por lo tanto tenemos la misma frustración en términos de apoyo del Estado a la labor que hacemos día a día”, lamentó.
Desde el Consejo de Rectores, en tanto, llamaron al Mineduc a abordar el tema de quienes perderán la gratuidad el próximo año porque excedieron el tiempo formal de la carrera, y que para el caso del Cruch serían alrededor de un 15 por ciento de los estudiantes, tal como lo indicó el vicepresidente ejecutivo del organismo, Aldo Valle.
“Si un estudiante que estaba en tercer año en el año 2016 accedió a gratuidad, como el programa termina en el año 2018, ese alumno aunque haya tenido tres años de gratuidad no puede mantenerla porque terminó la duración formal de su programa de pregrado. Eso hará que probablemente, 15% de los estudiantes que hoy están en gratuidad en el Consejo de Rectores hoy pierdan el derecho a la gratuidad”, advirtió.
En el Gobierno han evitado entrar en el debate, reconociendo un aumento del presupuesto en educación superior moderado. Además, han manteniendo cerrada la puerta para mayores recursos, ya sea para las universidades estatales o para las Becas Bicentenario como pide el oficialismo.
“Hemos hecho un esfuerzo por un presupuesto responsable, que fortalece a todas las instituciones de educación superior, y que por supuesto tiene también limitaciones. No solo para instituciones de sector privado, sino también para universidades estatales”, señaló la ministra de Educación, Marcela Cubillos.
Debido a los reparos que tuvo el presupuesto para la educación superior, la subcomisión mixta no aprobó los programas 29 y 30 que incorporan estos puntos, los cuales deberán ser zanjados por la comisión mixta.
La crítica respecto a educación superior, se une a la seguidilla de cuestionamientos hacia las diferentes partidas presupuestarias para el próximo año. Ciencia, regiones, cultura y salud, son otros de los ítemes para los cuales, diferentes actores, acusan insuficiencia.
