Con escasos miembros de sus respectivas delegaciones permanecen los hoteles internacionales de la Haya que van a albergar, en el caso de Chile, a abogados nacionales y extranjeros, y en el caso de Bolivia a su presidente, Evo Morales, exmandatarios de ese país y miembros del gabinete.

La puesta en escena va a superar a la chilena, cuando los jueces de la CIJ emitan su veredicto a cinco años y seis meses de iniciado el proceso, donde Bolivia reclama un diálogo para alcanzar una salida al mar.

Lo anterior, porque sólo hará comentarios de la resolución inapelable, el agente chileno ante la Corte, Claudio Grosmman, luego que el canciller Ampuero declinara viajar por orden del presidente Sebastián Piñera.

Jorge Sanz, académico de la Universidad de Diego Portales, cuestionó el espacio que se le está regalando a Bolivia con la ausencia del canciller.

El diputado de la UDI Issa Kort, miembro de la comisión de RREE de la cámara, insistió que se hace innecesario la visita del canciller en La Haya.

El presidente de esa comisión, el diputado frenteamplista Pablo Vidal, le restó relevancia a la ausencia de Ampuero en La Haya.

Grossman llega mañana a la Haya a las 6 horas en Chile y realizaría declaraciones, antes de ingresar al hotel Hilton.