La policía francesa detuvo a una banda delictual conformada por tres chilenos que se dedicaba a robar casas. En una de ellas hasta se llevaron una caja fuerte.

La BRB (Brigade de répression du banditisme) de París detuvo a tres individuos de nacionalidad chilena que cometieron una serie de robos en diversas viviendas.

Específicamente, la banda robó en diez casas del país europeo, sustrayendo hasta una caja fuerte en una de ellas, momento que fue captado por una cámara de seguridad.

En el registro se ve cómo los sujetos estacionan un vehículo para luego guardar en su interior el botín.

“Son tres ciudadanos de nacionalidad chilena quienes cometían delitos contra propiedad, específicamente delitos de robo en lugar habitado”, señaló el comisario Daniel Morales del área de análisis y monitoreo internacional de la OCN Interpol en Santiago.

“Uno de ellos ocurrió el 17 de noviembre cuando cometieron un robo en una casa particular en la que se llevaron una caja fuerte”, agregó.

“La BRB de Paris toma contacto con esta área especializada con la finalidad de pedir colaboración por una persona de la que mantenían sólo un nombre y un apellido para ver si se podía individualizar al sujeto”, mencionó.

De esta manera, en base al análisis criminal e inteligencia policial, el área individualizó a esta persona y entregó esta información a la policía francesa.

“Cuatro días después se detiene a estas tres personas camino a Bélgica y es ahí cuando la OCN Interpol corrobora las identidades”, indicó el comisario.

“Todos mantienen antecedentes acá en Chile. Uno de ellos tiene varios antecedentes en el extranjero, específicamente en España”, puntualizó.

Modus operandi

De acuerdo al medio francés Le Parisien, las edades de los chilenos van desde los 23 hasta los 50. Los tres fueron remitidos el 29 de noviembre a la Fiscalía de Nanterre.

“El trío es sospechoso de haber cometido diez robos, en Sena y Marne, Altos del Sena, Yvelines y Val-d’Oise, con daños estimados en 30.000 euros”, agrega el citado portal.

Para cometer sus ilícitos, los chilenos recorrían zonas residenciales mientras caía la noche, buscando aquellas casas que permanecieran oscuras.

Luego forzaban las puertas y ventanas para ingresar en los domicilios. En pocos minutos revisaban el lugar, llevándose las joyas y el dinero de sus víctimas.