El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció ese viernes que incluyó en su lista negra de sanciones a la aerolínea estatal venezolana Conviasa, una agudización de la presión de Washington contra el gobierno de Nicolás Maduro.

El secretario del Tesoro, Steven T. Mnuchin, dijo que el gobierno de Maduro “depende de la aerolínea estatal Conviasa para trasladar a funcionarios del régimen corrupto por el mundo para impulsar sus esfuerzos antidemocráticos”.

Con estas sanciones, los estadounidenses quedan advertidos de que “no pueden entrar en transacciones con esta aerolínea o con estas naves, incluyendo para chárteres”, dijo el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo.

La aerolínea tiene 10 vuelos internacionales incluyendo destinos en Bolivia, Ecuador, México, Panamá y República Dominicana.

“Esta acción no afecta la capacidad de viajar del pueblo de Venezuela, ya que pueden seguir haciéndolo en varias otras operadores que no están sometidas a sanciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC)”, indicó el Tesoro en un comunicado.

El Tesoro señaló que el gobierno de Maduro ha usado los aviones de Conviasa para “promover su propia agenda política” usándolos para trasladar a funcionarios hacia países como Corea del Norte, Cuba e Irán.

Estados Unidos no reconoce el gobierno de Maduro por las irregularidades en las elecciones de 2018 y considera como presidente interino al líder del Parlamento, Juan Guaidó.

En la lista de sanciones están señalados siete Boeing B737 de gran tamaño, entre una treintena de aeronaves.

Venezuela ha sufrido desde 2013 un masivo éxodo de aerolíneas por las deudas estatales de varios de miles de millones de dólares.

Desde Caracas vuelan todavía Copa, Air France, Air Europa, Tap, Iberia, Turkish Airlines, entre otras aerolíneas.

The Intercept / Srio. del Tesoro.
The Intercept / Srio. del Tesoro.

Canciller ruso condena sanciones desde Venezuela

El canciller ruso, Serguéi Lavrov, condenó este viernes en Caracas las sanciones económicas de Estados Unidos contra Venezuela y las presiones del gobierno de Donald Trump para sacar del poder por la fuerza al presidente socialista Nicolás Maduro.

“Estas restricciones son ilegales y constituyen la principal razón del receso de la economía de Venezuela”, dijo Lavrov tras reunirse con su homólogo venezolano, Jorge Arreaza, y con la vicepresidenta Delcy Rodríguez en el ministerio de Relaciones Exteriores.

Yuri Cortez / AFP
Yuri Cortez / AFP

Rusia es uno de los principales aliados de Maduro, sometido a una batería de sanciones de Washington que incluyen un embargo petrolero desde abril de 2019 y un bloqueo financiero a la devastada economía del país caribeño.

Moscú es además el segundo acreedor de Venezuela, después de China, con unos 7.500 millones de dólares, según una estimaciones de la consultora local Ecoanalítica.

Para Lavrov, el objetivo de las sanciones es generar un “levantamiento” popular contra Maduro, quien se aferra al poder con apoyo de un sector de la población, los militares, China y Cuba.

El bloqueo de transferencias bancarias “afectó tratamientos de cáncer. Nuestra tarea principal (…) es prestar atención a esos problemas y nuestro enfoque es que cualquier crisis puede ser solucionada a través de medidas políticas y diplomáticas, del diálogo”, añadió el diplomático ruso, según la traducción de una intérprete.

La visita de Lavrov, quien previamente estuvo en Cuba y México, se produce luego de que el miércoles el presidente estadounidense, Donald Trump, recibiera en la Casa Blanca al opositor venezolano Juan Guaidó, a quien reconoce como mandatario encargado de Venezuela junto con medio centenar de países.

Un día antes lo había invitado a su discurso sobre el estado de la Unión en el Congreso.

El jueves, en el marco de la visita de Guaidó a Washington, el representante de Trump para Venezuela, Elliott Abrams, insinuó que Estados Unidos pronto tomaría medidas contra Rusia por la relación cada vez más estrecha entre el gigante petrolero estatal Rosneft y Maduro.

“Consideramos inaceptables las sanciones e intentos del uso extraterritorial de legislación nacional”, afirmó Lavrov, sin aludir específicamente a esta cuestión, al participar en una mesa de diálogo que impulsan el gobierno y un sector minoritario de la oposición.

El canciller ruso también rechazó la presión estadounidense para sacar por la fuerza a Maduro, cuya “tiranía” Trump dijo que será aplastada.

“Considero que este escenario es inaceptable y vamos a ser responsables y la comunidad internacional condenará. Vamos a trabajar sobre este asunto en el Consejo de Seguridad” de la ONU, sostuvo Lavrov.

Yuri Cortez / AFP
Yuri Cortez / AFP