Todo comenzó con una visita a una tienda de electrodomésticos, en Anaheim, California, hasta donde llegó Mohamad Abdihdy.
El joven buscaba un televisor y se encontraba observando detenidamente el que sería su nuevo aparato electrónico. Sin embargo, otro de estos estaba a punto de jugarle una mala pasada.
Mientras media el diámetro de la pantalla, algo jamás pensado ocurrió: una fuerte explosión en uno de los bolsillos de su pantalón, lo sacudió a él y a toda la tienda.
De hecho, el estruendo fue tal, que un video de la cámara de seguridad del lugar, captó el fuerte sonido generado por la explosión. Acto seguido, puede verse al joven sacudirse violentamente y con el pantalón roto.
Una de las empleadas del establecimiento, según lo consignó WAVY TV 10, declaró que al escuchar el fuerte sonido, no tenían idea de lo que había pasado.
Tampoco el joven, a quien se acercaron para asistirlo, pero este decidió no acudir al hospital después de la quemadura que le dejó la explosión en casi toda su pierna.
El gerente de la tienda, declaró que fue una suerte no existiera material inflamable al alcance de las llamas, ya que pudo generarse un incendio.
Ambos comentaron luego del incidente, que no volverían a utilizar un cigarro electrónico, después de semejante experiencia.
Una advertencia reiterada
El periódico La Nación en Argentina, recogía información en 2017, acerca del peligro que conlleva utilizar estos aparatos electrónicos que no están permitidos en esa nación suramericana.
Al parecer, según consignan en su nota, el problema vendría de una falla en las baterías del e-cig, similar a lo que ocurrió con el Galaxy Note 7, aunque los cigarrillos electrónicos siguen siendo permitidos en los vuelos en Estados Unidos.
Sin embargo, entre 2015 y 2016, en la nación norteamericana la Administración de Alimentos y Medicamentos, conocida como FDA, recibió 70 denuncias de explosiones de e-cig. Se teme que la cifra en los últimos meses, sea mayor a las registradas, sin que se sepa exactamente el número, debido a que las personas que las sufren, no denuncian lo ocurrido.
Tampoco lo ha denunciado el cliente de la tienda en California, quien optó por no usarlo más pero luego de su mala experiencia.
