Normalmente, uno esperaría un nivel de profesionalismo mínimo de un mensaje enviado por una institución de gobierno. Buena ortografía y gramática, además de un mensaje cortés y directo al grano para responder a cualquier pregunta hecha por los ciudadanos.

Sin embargo, la maestra de inglés en retiro Yvone Mason se decepcionó cuando recibió una carta dirigida a ella de parte del presidente Donald Trump, la cual buscaba responder sus preguntas sobre las políticas relacionadas con la seguridad de las escuelas estadounidenses, pero terminó siendo un mensaje sin respuestas claras, y errores gramaticales que simplemente no pudo perdonar.

Fue por eso que decidió utilizar su confiable lápiz pasta morado, con el cual había corregido cientos de ensayos y reportes hechos por sus antiguos alumnos, y corrigió la carta enviada por el cuerpo de prensa.

“Recibí una carta del Sr. Trump. La devolveré mañana”, indica el post de Facebook en donde publicó su trabajo.

En la carta, se puede ver claramente como criticó la capitalización de ciertas palabras como “federal”, “nación” y la falta de especificación sobre qué agencias llevarán a cabo cada una de las propuestas citadas, así como también la falta de una guía clara que conecte las ideas entre sí.

“¿Han intentado utilizar el auto-corrector de gramática y estilo?” preguntó la profesora en su observación, finalizando con un simple pero directo mensaje “¡Oh, por dios, no, esto está MAL!”.

Cabe mencionar que, técnicamente, el manual de estilo de la Casa Blanca afirma que se debe utilizar la capitalización para ambas palabras cuando se refiere al Estado. Sin embargo, esto no es seguido completamente en la carta tampoco, lo cual abre la puerta a más críticas por parte de la profesora.

Las reglas de la Casa Blanca no siguen la gramática correcta en el idioma inglés, por lo cual sus correcciones seguirían siendo válidas.

Mason había escrito originalmente preguntando sobre qué acciones tomaría la Casa Blanca del presidente Donald Trump sobre los problemas con la violencia de armas y tiroteos en el país, debate que se ha convertido en un punto clave de la política estadounidense.

Sin embargo, admitió al medio estadounidense New York Times que encontró la respuesta que recibió deficiente.

Mason también recibió abuso en redes sociales por sus críticas al gobierno de Donald Trump, con muchas personas preguntándole si no tenía nada más que hacer con su tiempo, y disparando insultos hacia su ocupación anterior.

“Dejen que digan lo que quieran, benditos sean sus corazones. No me van a hacer cambiar de opinión” dijo en respuesta.