Dos exdirectores de los servicios de inteligencia surcoreanos fueron detenidos este viernes por sospechas de que desviaron fondos para el entorno de la expresidenta Park Geun-Hye, destituida por su implicación en un escándalo de corrupción.

La justicia acusa a Nam Jae-Joon y Lee Byung-Kee, exdirectores del Servicio Nacional de Inteligencia (NIS), de haber desviado 4.000 millones de wones (3,6 millones de dólares) del presupuesto de la agencia para entregarlos a colaboradores de Park.

El tribunal del distrito central de Seúl dio su visto bueno a la emisión de sendas órdenes de arresto contra los exespías, alegando riesgos de fuga o de destrucción de pruebas.

Nam y Lee, directores del NIS entre 2013 y 2015 cuando Park estaba en la presidencia, son sospechosos de malversación y corrupción.

Según la prensa, ambos le contaron a la fiscalía que hicieron “giros mensuales” a colaboradores de Park, a petición de éstos. La acusación asegura que, a cambio, querían conseguir favores para su carrera.

Dos exconsejeros de Park fueron detenidos a primeros de mes por sospechas de que eran los destinatarios de los fondos desviados. Según la prensa local, afirman haber actuado siguiendo órdenes de la expresidenta.

Park, la primera mujer presidenta de Corea del Sur, fue destituida en marzo e inculpada en abril por un escándalo de corrupción en el que están implicadas grandes compañías del país como Samsung.

El escándalo se centra en su confidente, Choi Soon-Sil, acusada de haber cobrado grandes cantidades de dinero de esas empresas.

Las dos mujeres están en prisión preventiva y son juzgadas por corrupción y abuso de poder.