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El Tribunal Superior de Bogotá ratificó esta semana la condena a cuatro integrantes de la "primera línea" en Colombia, impuesta por disturbios ocurridos entre noviembre de 2019 y febrero de 2020 en la capital. La sentencia de más de 19 años de cárcel se basó en delitos como terrorismo, violencia contra servidor público, daño en bien ajeno y perturbación del transporte público. Las pruebas incluyeron intercepciones telefónicas que revelaron la conexión de los acusados con exmiembros de las Farc. Se detalló que estos individuos seguían un plan estratégico de movimientos de masas en zonas urbanas denominado "uniones solidarias", capacitando a jóvenes para infiltrarse violentamente en manifestaciones. Los imputados organizaron ataques que causaron daños valuados en $2.800.000.000 millones, según la justicia colombiana.

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Esta semana, el Tribunal Superior de Bogotá, en Colombia, ratificó la condena a cuatro integrantes de la “primera línea”, por disturbios en noviembre de 2019: más de 19 años de cárcel.

Según consignó el medio El Tiempo, en el fallo -de 85 páginas- se confirman los delitos de terrorismo, violencia contra servidor público, daño en bien ajeno y perturbación del transporte público.

Cabe mencionar que los hechos en cuestión ocurrieron en el periodo entre noviembre de 2019 y febrero de 2020 en la capital de Colombia.

Entre las pruebas se consideró intercepciones telefónicas. En dicha evidencia se estableció que los sujetos mantenían contacto con exmiembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).

Según el fallo, citado por el mismo medio antes citado, “alias Martin o Negro desarrollaba la guerra de 4ª generación, “lucha de masas” en cumplimiento del plan de la segunda Marquetalia, organizado y creado por las disidencias de las Farc”.

Quienes “decidieron dejar a un lado los acuerdos de paz, para retomar las armas, esos grupos al margen de la ley, diseñaron un plan estratégico de movimientos de masas en zonas urbanas llamándolas uniones solidarias”.

Igualmente, el magistrado indicó que “Florez Durán, fue la coordinadora y estructuradora para entrenar a los jóvenes en las universidades”.

“¿Y para qué los iban a entrenar? ¿Para jugar fútbol, jugar ajedrez, tocar un instrumento? no, los entrenaban para infiltrarse de forma violenta en las manifestaciones como sucedió”, agregó.

Además, el fallo confirma que los imputados organizaron a otras personas para que, en líneas de ataque, generen daños y obstrucción al trasporte público. A esto se suma, entre otros, obstrucción de vías públicas.

Según estableció la justicia colombiana, lo anterior causó daños avaluados en un monto de $2.800.000.000 millones.