Los colegios electorales de Brasil cerraron sus puertas este domingo tras unos comicios para los que estaban convocados 156,4 millones de votantes para elegir presidente, gobernadores, diputados, un tercio del Senado y renovar las asambleas legislativas regionales.

A las 17:00 horas (tanto en Chile como en Brasilia), comenzaron a cerrar las mesas de votación en Brasil, donde este domingo se celebran las elecciones primarias presidenciales, así como elecciones para gobernadores, senadores, y diputados federales y estatales.

Así, el Tribunal Supremo Electoral comenzó oficialmente el conteo de votos, los cuales dan preliminarmente una amplia ventaja a Lula da Silva y Jair Bolsonaro para pasar a segunda vuelta.

Sin embargo, hay muchas zonas en las que las mesas aún no pueden cerrarse debido a las largas filas que se formaron, por lo que las autoridades anticipan que podrían mantenerse abiertas hasta por dos o tres horas más.

En caso de que ninguno de los candidatos alcance más de la mitad de los votos válidos, los dos más votados tendrán que enfrentarse en una segunda vuelta prevista para el 30 de octubre.

Para esta jornada se anticipaban escenarios de violencia, tras cuatro asesinatos por motivaciones políticas ocurridos durante la campaña.

Cierre de mesas durante las elecciones en Brasil

A lo anterior se suman múltiples enfrentamientos entre seguidores de los dos candidatos favoritos, el presidente Jair Bolsonaro y el expresidente Lula da Silva, por lo cual incluso la Corte Suprema prohibió el porte de armas desde este sábado a este lunes.

Sin embargo, la jornada trascendió sin mayores incidentes, salvo algunas situaciones extraordinarias.

Según el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, en el país se habían registrado hasta dos horas antes del cierre 663 delitos electorales.

En todo este proceso fueron detenidas 250 personas, entre ellas algunos de los candidatos regionales que se promovían dentro de los lugares de votación e infringían la legislación electoral.