Perú solicitó explicaciones por un muro que Ecuador construye en la frontera común, sobre un espacio que debía haber quedado libre, según un acuerdo de paz que ambos firmaron en 1998, informó una fuente diplomática a AFP.
El muro, que planea tener una extensión inicial de 2.000 metros, se tiende sobre el lado ecuatoriano en la localidad de Huaquillas, colindante con la peruana Aguas Verdes. Hasta hace poco, ambas ciudades estaban separadas solamente por un canal del río Zarumilla.
Ecuador construye el muro sobre la orilla del canal que está en su territorio, en un hecho que se suma a la polémica por la edificación de muros entre países vecinos, como planea el presidente Donald Trump en la frontera con México.
Según explicó una fuente diplomática a la AFP, en 1998, tras el conflicto bélico que Perú y Ecuador sostuvieron tres años antes, se firmó un tratado de paz en el que, entre otras cosas, ambas partes se comprometieron a dejar libres de construcciones 10 metros a cada lado del canal, para labores de limpieza.
El muro ecuatoriano estaría montado sobre territorio que debía quedar libre, según Lima. Por ello, la cancillería peruana solicitó información a su par ecuatoriana. La obra fue iniciada a pocos días de terminar la gestión del presidente Rafael Correa.
El tema queda en manos de su sucesor, Lenín Moreno, quien hace poco visitó Perú como gobernante electo y se reunió con el presidente Pedro Pablo Kuczynski. En esa ocasión ambos se comprometieron a continuar con el buen clima de relación bilateral. El mandatario peruano asistió luego a la toma de mando de Moreno.
La prensa ecuatoriana informó el viernes que, de acuerdo con compromisos binacionales, el gobierno de Moreno planea la edificación de un parque lineal en un territorio de 24.000 m2, del cual hará parte el muro, para fomentar las áreas verdes y recreación.
“Un muro de cuatro metros de altura nos separa e impide intercambiar los productos con la facilidad que había antes, todos los comerciantes que trabajaban en los puentes quedaron en la desocupación”, dijo al diario El Universal de Ecuador el dirigente de la Asociación Pacífico Sur, de Huaquillas, Abel Jiménez.
Según el dirigente, el muro afecta a unas 10.000 familias.
En ese territorio abunda el comercio informal, con colocación de puentes provisionales para el paso del transporte sobre el canal, de uno y otro lado. El muro buscaría contener el contrabando.
“Las personas que están allí (al filo del canal) deben salir, el gobierno les está dando una alternativa para que puedan realizar sus actividades comerciales de forma digna”, dijo Marco Zumba, director provincial del Ministerio de Vivienda de Ecuador, a El Universal.
