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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El director Vicente Sabatini abordó el final de la icónica teleserie chilena "Romané", desmintiendo la supuesta influencia de la Iglesia en la separación de los personajes del cura Juan y la gitana Jovanka. Sabatini aclaró que la Iglesia solo permitió grabar en sus instalaciones, sin exigir cambios en la trama. Afirmó que el desenlace fue una decisión personal, basada en la importancia de las vocaciones en la época de la historia, marcada por la dictadura.

En entrevista con AR13, el afamado director Vicente Sabatini se refirió a uno de los mayores ‘mitos’ de las teleseries chilenas: el final de Romané y una supuesta injerencia de la Iglesia para que los personajes del cura Juan (Francisco Reyes) y la gitana Jovanka (Claudia Di Girolamo) no quedaran juntos en la historia.

De entrada, Sabatini reconoce que: “Era uno de los finales posibles”.

Sabatini por final de Romané

“Uno toma muchas decisiones. Nadie nos dijo, quiero aclarar por si todavía quedan dudas. Nosotros nos sentamos a conversar con las autoridades de la Iglesia, porque necesitábamos grabar en una iglesia y para que las autoridades nos admitieran fuimos a pedirles permiso para poder mezclar esta religiosidad de la Virgen Popular, la Santa Sara, con la católica”, agregó.

Sobre el desenlace de la teleserie en sí, el director de TV negó que la producción hubiera tenido intervención de parte de la Iglesia chilena.

“Ni un ejecutivo del canal, ni nadie de la Iglesia puso ninguna exigencia para esto. Y tuvimos permanentemente la compañía de, o sea, teníamos unos asesores, que eran curas trabajando con nosotros durante el proceso”, sostuvo.

“El final es solo culpa mía (…) Tiene una reflexión muy personal. Tiene que ver con el tema de las vocaciones, con el rol y la importancia que la Iglesia tenía en esa época, que no es la Iglesia que vemos hoy día. Era una iglesia pre-denuncia, pre-muchas cosas”, añadió.

“Veníamos de la dictadura reciente y la Iglesia había sido un pilar fundamental para defender la vida. Y, por lo tanto, a mí me parecía que el magisterio tenía un valor social y lo puse sobre la mesa. Me parecía que esa vocación que representaban los curas en ese momento tenía un valor por sobre lo bonito de una historia de amor que era muy rupturista”, concluyó.

Hay que señalar que la reconocida teleserie de TV actualmente está siendo retransmitida por el canal público, durante las tardes.