El grupo automovilístico alemán Volkswagen interrumpirá en mayo durante varios días algunas cadenas de montaje, que acababan de retomar la producción, a causa de la escasa demanda de autos, anunció la empresa este miércoles a sus empleados.
Dos cadenas de montaje situadas en su sede histórica de Wolfsburg serán cerradas integralmente y en otra habrá reducción de horarios, explicó el grupo en su sitio intranet el martes.
La interrupción afecta en particular los modelos Golf y Tiguan de la marca principal, VW.
Volkswagen, que había vuelto a producir a finales de abril tras semanas de cierre a causa del nuevo coronavirus, se ve obligado a “ajustar continuamente la producción en función de las fluctuaciones previstas del mercado”, explicó un responsable de recursos humanos, Arne Meiswinkel, en el mensaje a los trabajadores.
“Los clientes no se interesan en la compra de coches” y los depósitos donde están almacenados los vehículos producidos “ya llegan a sus límites”, advirtió a finales de abril el presidente del poderoso comité de empresa, Bernd Osterloh.
“La llegada de pedidos es desastrosa”, dijo.
Moody’s bajó el miércoles sus previsiones para el mercado automovilístico mundial, y espera ahora una caída del 20% de las ventas en 2020, particularmente en Europa, con un 30% menos, y un 25% en Estados Unidos.