La Asociación de Isapres de Chile, que agrupa a las instituciones que atienden hoy a más de 3,3 millones de personas, presentó una propuesta al sistema de salud.

Lo anterior, centrado en la creación de un Plan de Salud Universal (PSU) -que debe ser “el reflejo de las prioridades de salud que el Estado establezca”, precisaron– el cual, plantean, podría ser ofrecido por entidades públicas o por las isapres, garantizando “un estándar de calidad y prestaciones similares para todos”.

El presidente de la Asociación de Isapres, Gonzalo Simon, expresó que “se requiere avanzar de manera decidida en materializar una reforma sustantiva, profunda y permanente al sistema de salud vigente en Chile”.

“Estamos convencidos de la urgente necesidad de abordar el anhelo de la ciudadanía por contar con un sistema de salud más justo y equitativo. Del mismo modo, estamos seguros de que podemos seguir siendo un aporte tanto en el debate sobre las modificaciones necesarias al sistema, como en el futuro sistema de salud que acuerden el Congreso y la Convención Constitucional”, agregño.

El eje estructural de la propuesta del gremio se basa en la complementariedad del sistema público con el privado, de tal forma de avanzar en cobertura y calidad.

Asimismo, se plantea la creación de un Plan de Salud Universal, así como de un Instituto de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (Inetesa) que tendrá el mandato y la autoridad para determinar los aspectos relevantes del PSU, establecer las nuevas tecnologías y prestaciones preventivas e indicar las enfermedades, medicamentos y protocolos que podrán ser incluidos en el plan, entre otros.

Además, proponen mejorar la capacidad de fiscalización de la calidad de las prestaciones, fortaleciendo las facultades de la Superintendencia de Salud, entidad que será encargada de velar por el cumplimiento del PSU en los sectores público y privado; la movilidad y la universalidad del Plan de Salud Universal; la creación de un fondo de compensación por riesgo de todo el sistema de salud, tanto público como privado; y por último, crear una nueva institucionalidad para la recepción y administración de las licencias médicas.

Desde las isapres destacan que para concretar el avance hacia un Plan de Salud Universal deberá existir un período de transición, de modo de “garantizar la continuidad de las prestaciones y la atención a la población, evitando cambios abruptos que puedan desmejorar el acceso a la salud”.