Japón instó este lunes a los turistas a alejarse del volcán Aso, que entró en erupción durante la mañana y seguía escupiendo humo y cenizas a principios de la tarde.

Las autoridades elevaron el nivel de alerta volcánica a grado 3 sobre 5, mientras una espesa humareda blanca se elevaba unos 2.000 metros por encima del enorme volcán situado en la isla de Kyushu, en el sureste del país.

Por el momento, no se registraron víctimas ni desperfectos. Las autoridades habían instado a los visitantes de este apreciado enclave a evacuar rápidamente.

La erupción obligó a las aerolíneas a suspender siete vuelos interiores, indicaron a la AFP portavoces de ANA y Japan Airlines (JAL).

El monte Aso, que se despertó en noviembre del año pasado, ha registrado desde entonces pequeñas erupciones.

En agosto, la agencia meteorológica había emitido una alerta, tras detectar actividad sísmica alrededor de otro volcán, el Sakurajima, más al sur.

El archipiélago nipón se encuentra en el denominado “Cinturón de Fuego” del Pacífico, que registra un gran número de sismos y de actividad volcánica. El monte Aso forma parte de los volcanes con un grado elevado de vigilancia, entre los 110 activos en Japón.

Esta erupción tiene lugar una año después de la del monte Ontake, que sorprendió a varios cientos de excursionistas y mató a más de 60 personas.