Un total de 43 viviendas, seis industrias y seis edificios comunitarios revisados, fue el resultado de la fiscalización realizada el jueves por la autoridad provincial sanitaria a raíz de la primera emergencia ambiental en Osorno, que afectó a un 70% de la población del sector sur oriente de la ciudad.

Un resultado que dejó señales positivas pues no se aplicó ningún sumario sanitario por evadir las medidas restrictivas exigidas por la mala calidad del aire, que rigen desde las 18 horas hasta la medianoche.

Entre los principales problemas detectados en los hogares que fueron fiscalizados, se destaca el uso de leña húmeda, la mala manipulación de los artefactos de calefacción a tirajes abiertos y el desconocimiento de las medidas que contemplan las alertas sanitarias.

De acuerdo al doctor y director de la Comisión de Medio Ambiente de la Sociedad Chilena de Enfermedades Respiratorias, Edgardo Grob, la comunidad osornina ha mostrado en este último tiempo un avance en la conciencia del problema medioambiental que presenta la ciudad.

El especialista sostuvo también que pese a las mejores, a la comunidad aún le falta mucho en aspectos como la voluntad de informarse sobre la crisis de la calidad del aire.

Cabe mencionar que durante el transcurso del año pasado se presentó un único episodio crítico de emergencia en Osorno, y en esa ocasión un 30% de las viviendas hicieron caso omiso a las medidas, mientras que ayer en este primer episodio se comprobó que más del 70% de la comunidad cumplió con las restricciones indicadas.