Tras la decisión del municipio de Los Ángeles de no entregar permisos para el desarrollo del comercio ambulante el próximo 1 de noviembre en las inmediaciones de los cementerios de la ciudad, las personas afectadas manifestaron su molestia, porque aseguraron que por primera vez se les impide trabajar.

Desde la corporación edilicia se informó que la medida obedece a “la visible congestión vehicular que han originado los proyectos en desarrollo, dicha situación vial significa riesgos tanto para peatones como para automovilistas, por lo que la presencia de comercio ambulante agravaría aún más el estado de congestión para quienes deban trasladarse a recordar a sus familiares y seres queridos fallecidos”.

Sin embargo este argumento no convenció a las afectadas. Es el caso de Andrea Fernández, quien indicó que se les propuso como punto alternativo de venta el Polideportivo, sin embargo lleva ochos años trabajando en Gabriela Mistral y asegura que al cambiarse de lugar no sería lo mismo.

Por su parte Sandra Bravo, quien lleva dos décadas trabajando para el día de todos los santos, dijo que es injusto que por primera vez no se les quiera dar el espacio para trabajar, porque los vendedores compraron su stock de forma anticipada.

Cabe mencionar que desde el municipio se indicó que el año pasado se instalaron cerca de 400 vendedores, sin embargo este año la situación es distinta y no se puede autorizar a igual número de personas. Por ello, se analiza la situación de los vendedores de flores, por tratarse de un servicio necesario.