El sonido que emiten las ranas Túngara macho para atraer a las hembras se convierte en su peor enemigo, ya que permite a los murciélagos localizarlas y cazarlas, según un estudio divulgado en Panamá por el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI, por sus siglas en inglés).

Según el trabajo, las ranas Túngara macho llaman a sus hembras desde los charcos donde habitan produciendo un sonido que termina siendo propagado a través de las ondas que se crean en el agua.

“Desafortunadamente para las ranas, su principal depredador, un murciélago que se alimenta de éstas, también detecta las ondas, haciendo de las ranas una presa más fácil”, asegura el STRI, con sede en Panamá.

El estudio asegura que las ranas hembra de la especie conocida con el nombre científico de Physalemus pustulosus son atraídas en gran número a los estanques, desde donde los machos llaman noche tras noche.

Pero estos llamados “también hacen que sea más fácil que los murciélagos que se alimentan de ranas, los Trachops cirrhosus, encuentren a sus presas”, según un comunicado.

“Es comparable al uso de la lectura de labios”, comentó Wouter Halfwerk de la Universidad de Leiden, uno de los autores del estudio que publica la revista Science junto al STRI, la Universidad de Texas y la Universidad de Salisbury.

“Cuando un murciélago vuela cerca, la primera línea de defensa de la rana es dejar de llamar”, comentó Rachel Page, científica del STRI.

“Pero las ondas en el agua continúan durante unos segundos, dejando efectivamente una huella de detección para el murciélago que se acerca”, añadió.