Continúan las reacciones tras la renuncia del Papa Benedicto XVI, quien este lunes anunció que dejará su cargo el próximo 28 de febrero debido a razones de salud.

En Chile José Andrés Murillo, querellante del Caso Karadima que en la actualidad se desempeña como Presidente de la Fundación Para la Confianza, señaló que a su juicio la salida de Joseph Ratzinger se debió a problemas políticos atribuidos a presiones dentro de la Iglesia.

En relación al tema, Murillo discrepó con aquellos que resaltaron la forma en la que Joseph Ratzinger enfrentó las denuncias de abusos sexuales contra menores de edad al interior de la Iglesia.

Ante ello, indicó que el Papa no fue contrario al encubrimiento de los casos, sobre todo, por su rol como encargado de la Congregación para la Doctrina de la Fe durante varios años, antes de ser Sumo Pontífice.

Murillo expresó además que la elección del nuevo Papa es una buena oportunidad para que la Iglesia se abra más hacia las comunidades.

De lo contrario, a su juicio se transformará en una secta integrista de lujo.