Las tempranas eliminaciones de Argentina y Brasil, candidatos al título por historia, del Campeonato Sudamericano Sub-20 de fútbol causó sorpresa y vergüenza por partes iguales, tanto en los participantes del certamen como en la prensa de ambos países.

Argentinos y brasileños tienen entre sí 11 títulos mundiales de la categoría, 6 y 5 respectivamente, además de acumular 15 a nivel sudamericano (4 y 11 cada uno), por lo que sus ausencias en la fase final del torneo que se disputa en Mendoza y por consiguiente del Mundial de Turquía-2013, causó sorpresa a más de uno.

En tierras sudamericanas siempre se consideró al fútbol de la albiceleste y de la verdeamarilla como los dominadores del continente, algo que al menos por estos días no sucede.

La palabra “fracaso” fue la utilizada por el entrenador alterno de Argentina Oscar Garré para calificar el porqué el equipo quedó eliminado en primera ronda al quedar detrás de Chile, Colombia y Paraguay, y solo haber superado en puntaje a Bolivia.

“El no pasar la primera fase no es lo que teníamos pensado y sentimos que no le pudimos dar la alegría a la gente y a los dirigentes. Creo que es un fracaso, es la realidad”, sentenció Oscar Garré ante una consulta de AFP en la conferencia de prensa posterior al triunfo sobre Colombia 3-2, aunque ya estando eliminado.

En Argentina el debate se abrió pensando en el futuro y extrañando la era de José Pekerman y Hugo Tocalli al frente de los seleccionados juveniles, quienes lograron cinco títulos mundiales –junto a Francisco Ferraro- y luego de ellos la albiceleste está ausente de dos de los últimos tres certámenes.

A su turno, el DT brasileño Emerson Avila calificó de “vergüenza” la eliminación en primera ronda del certamen continental y la ausencia del Mundial para defender el título obtenido en Colombia-2011,

“Es una vergüenza. Es muy triste volver a Brasil con un sentido de la vergüenza. No tenía (el equipo) ni siquiera un buen juego. Ni cuando le ganamos a Venezuela”, afirmó el entrenador brasileño luego de la eliminación en San Juan.

Argentina, comandada por Marcelo Trobbiani, llegó con la ilusión de los ‘cinco fantásticos’ (Ricardo Centurión, Luciano Vietto, Manuel Lanzini, Alan Ruiz y Juan Manuel Iturbe), pero apenas le pudo ganar a Colombia, empató con Bolivia (2-2) y cayó frente a Chile (1-0) y Paraguay (2-1).

Brasil llegó precedido de una rica historia sudamericana y con nombres en su plantilla como Rafael Alcántara y Mattheus (hijo del recordado Bebeto), pero que sin embargo solo logró derrotar a Venezuela (1-0), empató con Ecuador (1-1) y perdió con Uruguay (3-2) y Perú (2-0).

Pero no solamente la prensa de cada país está desilusionada con la actuación de sus equipos. En diálogo con AFP el entrenador de Colombia, Carlos Restrepo, reconoció que “sorprende mucho, porque son países históricos, que tienen muy buenas selecciones”.

“El fútbol a veces es especial, es difícil de interpretar, y más allá de las buenas estructuras que tienen, creo que enderezarán el camino”, agregó el técnico cafetero.

En tanto, el adiestrador de Chile, Mario Salas, cuyo equipo ganó los primeros cuatro partidos –en igual cantidad de presentaciones- y es uno de los candidatos a quedarse con un pasaje a Turquía, afirmó: “creo que a todos nos ha sorprendido las actuaciones de Brasil y Argentina, y yo no soy la excepción”.

El mediocampista paraguayo Derlis González, autor de tres goles en la competición, resaltó la labor del equipo que clasificó en tercer lugar en el Grupo A, relegando precisamente a Argentina y sostuvo que el equipo albiceleste “se creyeron tanto y al final nada”.

El Campeonato Sudamericano Sub-20, que continuará este domingo con el hexagonal final en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, tendrá como protagonistas a Chile, Paraguay, Colombia, Uruguay, Ecuador y Perú, y como detalles inéditos las ausencias de Brasil y Argentina.