Con otra gran actuación de su astro LeBron James, el Miami Heat se coronó la noche del jueves en su cancha campeón de la temporada 2011-2012 de la NBA tras vencer a Oklahoma City Thunder 121-106, en el quinto partido de la final para ganar la serie 4 victorias a 1.

James, que vio realizado por fin su sueño de un primer anillo de campeón, cargó de nuevo con el Heat para terminar con un triple-doble de 26 puntos, 11 rebotes y 13 asistencias, apoyado por sus compañeros Mike Miller, con 23 unidades, Chris Bosh 24 y Dwyane Wade 20 cartones.

Miami se reivindicó de su pobre actuación la pasada temporada cuando cayó en la final frente a Dallas Mavericks (4-2), en la que fue la primera temporada de los ‘Tres Reyes’, James, Wade y Bosh.

Lebron, que fue criticado en aquella serie por su floja actuación, se redimió ahora con creces al ser elegido el Jugador Más Valioso de la final (MVP en inglés).

“Esto es lo que he soñado toda mi vida. Este momento de alzar el trofeo. Estoy muy, muy feliz”, declaró James.

El Heat abrió esta serie con derrota en el primer partido en Oklahoma City (105-94) y ganó el segundo en esa misma plaza (100-96). De regreso a sus predios, Miami se llevó en fila el tercero (91-85), el cuarto (104-98) y este del jueves.

Miller tuvo una gran actuación saliendo de la banca para encestar 7 de 8 triples que marcaron gran diferencia, mientras el Heat anotaba 14 de 26 tiros de larga distancia, cifra récord para un partido de final de la NBA.

Por OKC destacaron de nuevo los canasteros Kevin Durant, con 32 puntos y 11 tablas, y Russell Westbrook y James Harden, con 19 per cápita.

LeBron, que en el partido anterior había terminado con fuertes calambres en las piernas, regresó dos días después completamente restablecido para guiar con su juego total a la tropa miamense.

Como para tranquilizar a sus parciales, James estrenó el pizarrón con un donqueo de altos kilates, y desde entonces el Heat comenzó a funcionar con más regularidad que los Thunder, para llevarse el primer parcial 31-26.

Hacia finales del tramo, Miller encestó dos de sus 7 triples de la noche, y el novato Norris Cole le imitó con otro canastazo mayor, para mantener el dominio del Heat.

Miller siguió con la mano caliente en el segundo cuarto y anotó otros dos triples, mientras el Heat ligaba una racha de 19-4 en la medianía del segmento para sacar ventaja de hasta 17 puntos.

Empero, el barbudo James Harden y Durant sacaron a OKC del foso con oportunos encestes, permitiendo a los ‘rayos’ acortar distancia para irse al descanso perdiendo 59-49.

Miami tuvo un tercer cuarto arrollador en el que llegó a ostentar hasta 26 puntos de ventaja mientras dejaba a los Thunder sin anotación por unos cuatro minutos.

En el tramo, Shane Battier se unió a Miller ‘Time’ en los bombazos a distancia, y el espigado Chris Bosh se regaló con 11 puntos, para que Miami cerrara la tercera parte del encuentro con ventaja de 95-71.

A estas alturas, los de OKC estaban ya totalmente desbordados, pero el Heat no quitó la presión en la defensa y siguió fabricando puntos, con la puntería prodigiosa de Miller y las jugadas de lujo de LeBron.

Faltando 3 minutos para el final, la ventaja de Miami era de 118-99, Oklahoma City había guardado en la banca a Durant y Westbrook, y el Heat hacía lo mismo con Lebron, Wade, Bosh y el resto de sus titulares.

Los jugadores del Heat comenzaron a abrazarse mucho antes de sonar la chicharra final, con LeBron encabezando la celebración y una sonrisa de felicidad de oreja a oreja.

Para James, Chris Bosh, Miller, Shane Battier y el propio técnico Erik Spoelstra, este fue su primer título de la NBA.