Investigadores europeos anunciaron este jueves que habían creado un dispositivo invisible a campos magnéticos estáticos, lo que podría tener aplicaciones prácticas militares y médicas.

Este avance consiste en la creación de campos magnéticos estáticos generados por un imán permanente o una bobina atravesada por una corriente eléctrica continua. Estos campos electromagnéticos se utilizan ya en imágenes médicas de resonancia magnética y en numerosos sistemas de seguridad, como los de los aeropuertos.

El dispositivo que inventó Fedor Gomory y sus compañeros de Eslovaquia y España, descrito en una investigación aparecida en la edición temprana de este viernes de la revista científica Science, habla de un cilindro con dos capas concéntricas.

Mientras que la capa interior está hecha de un material superconductor que repele los campos magnéticos, la capa exterior está compuesta por un material ferromagnético que los atrae.

Situado en el campo magnético, el cilindro no lo perturba y no muestra ni sombra ni reflejo. Por tanto, un objeto situado en su interior no podría ser detectado magnéticamente y sería insensible al campo magnético en el que se encuentra, explica a la AFP el coautor del estudio, Alvaro Sánchez, de la Universidad Autónoma de Barcelona, quien utiliza el término “invisibilidad”.

“Hay muchas aplicaciones, para coches, barcos o submarinos”, afirma Sánchez.

Sánchez explicó que el dispositivo podría ser usado para pacientes que tienen un marcapasos, sensible a las ondas electromagnéticas, y que necesita un escáner de resonancia magnética de una rodilla o de otra parte del cuerpo, de forma que la imagen no sería distorsionada.

Como está fabricado con materiales comercialmente disponibles al igual que opera bajo campos magnéticos relativamente fuertes y a temperaturas relativamente cálidas, el dispositivo podría ser fácilmente puesto en uso, según explican los autores.

“Para el submarino, podrías hacer una capa alrededor del mismo que lo convertiría en indetectable magnéticamente”, dijo Sánchez.

“También podría ser usado para proteger los equipos (militares y médicos) contra alteraciones electromagnéticas”, agregó.