Hoy se puso la primera piedra del centro experimental de algas para el desarrollo de biocombustibles en la sede Chinquihue de la Universidad de Los Lagos.

Este proyecto es el resultado de una alianza entre Corfo, La Universidad de Los Lagos y la empresa norteamericana BAL, y permitirá crear el primer centro en el sur del país para desarrollar tecnologías que contribuyan a la generación de esta nueva forma de energía limpia y renovable.

De acuerdo a lo señalado por el rector de esta casa de estudios, Oscar Garrido, este proyecto tiene una inversión inicial de 3 mil 500 millones de pesos y permite a la universidad aportar desde la investigación científica básica, gracias a esta alianza público privado, lo que reactivará una parte de la empresa acuícola.

Este proyecto será liderado por Alejandro Baschmann, académico y director del centro IMAR de la Universidad de Los Lagos, quien explicó que las algas Macrocystis pyrifera, más conocida como huiro, son la biomasa ideal para la producción a escala comercial de biocombustibles, pues hasta un 45% de contenido son azúcares fermentables, no posee lignina, no requiere de tierra cultivable y reduce la polución marina.

Este centro experimental se espera que esté finalizado el 2012 y se emplazará en un edificio de 600 metros cuadrados dentro del campus Chinquihue, donde albergará laboratorios especializados con equipos de molienda, fermentadores y bioreactores, para producir unos 2,400 litros de etano por año.