La fiscalía de San Felipe se declaró incompetente para investigar la denuncia por abuso sexual en contra del sacerdote de la iglesia Andacollo de esa comuna, por lo que traspasó el caso a la justicia canónica.
La denuncia fue interpuesta por una joven de 20 años, quien asegura que el sacerdote le habría pedido que se desnudara para luego realizarle tocaciones en sus partes íntimas, todo esto en un supuesto rito de sanación.
Yasmine Aspe, fiscal que recibió el caso, declaró a través del portal Aconcagua Online que, al tratarse de una persona mayor de edad, la Ley Civil exige la concurrencia de circunstancias muy particulares para que un hecho revista caracteres de delito sancionable a través de la Ley Penal. En este caso, esas circunstancias no se dieron, según señaló.
Esta situación llevó a que la fiscalía remitiera todos los antecedentes a la justicia eclesiástica, entendiendo que desde el Derecho Canónico, eventualmente por la gravedad que revisten los hechos denunciados, pudiese haber algún tipo de sanción. Cabe señalar que, tomando en cuenta las distintas denuncias que se han realizado en la zona contra sacerdotes por delitos sexuales, es primera vez que una de estas acusaciones por incompetencia se remite a la justicia canónica.
Por otra parte, el Obispado de San Felipe, a través de una declaración publica señaló que sólo se enteró del caso a través de los medios de comunicación y que el sacerdote ha reiterado su inocencia frente a las acusaciones. Además, confirma que el Obispo ha dispuesto el inicio de una investigación y que para facilitar el curso de esta fase indagatoria, el sacerdote Raúl Inostroza Caro ha sido liberado de su responsabilidad como párroco.
