Las exportaciones francesas de armamento cayeron a la mitad pasando de 8.000 millones de euros (11.000 millones de dólares) en 2009 a 4.300 millones de euros (6.100 millones de dólares) en 2010, afirma el miércoles el diario económico Les Echos.

Esa cifra fue establecida en función del monto de los contratos firmados y por los cuales los países compradores entregaron un anticipo, precisa ese matutino que cita fuentes coincidentes.

Después de varios años de crecimiento, las exportaciones francesas de armamento volvieron a su nivel de 2005, luego de un año récord en 2009 debido a importantes contratos para la venta de submarinos y helicópteros a Brasil, gigante sudamericano al que Francia intenta venderle 36 aviones de caza Rafale.

Francia nunca logró exportar ese avión de combate, fabricado por el grupo francés Dassault, que por ahora equipa sólo a su Fuerza Aérea.

Aviones Rafale entraron en acción en Libia, en el marco de la intervención militar aérea lanzada por una coalición internacional en la que también participan Estados Unidos y Gran Bretaña.

A principios de 2010, Francia preveía que su cifra de exportación de armamentos ascendería a entre 10.000 a 12.000 millones de euros, pero hasta ahora ninguno de los clientes potenciales del Rafale tomaron una decisión.

Por ese contrato multimillonario en Brasil, el Rafale francés compite con el F/A-18 Super Hornet del estadounidense Boeing y con el Gripen del sueco Saab.

Paralelamente Francia negocia desde 2008 la venta de 60 ejemplares a los Emiratos Arabes Unidos. París propuso también ese avión de combate a India, Kuwait, Suiza, Grecia e inclusive Libia.

Francia es uno de los mayores exportadores de armas del mundo junto a Italia, Rusia, Gran Bretaña y Estados Unidos.

En 2008 el grupo británico de defensa BAE Systems se convirtió en el mayor fabricante de armas del mundo según el informe 2010 del Instituto Internacional para la Búsqueda de la Paz (SOPRI) un grupo de referencia en materia de armamento con sede en Estocolmo.

Fue la primera vez que ese liderazgo queda en manos de un grupo no estadounidense.