La sudafricana Caster Semenya, campeona del mundo de 800 metros, que ganó su primera carrera en su país después de su parón de once meses tras una investigación sobre su género, tiene también la mirada puesta en ganar la prueba de 1.500 metros en Londres-2012.

“Miro mis primeros Juegos Olímpicos y el plan incluye en ganar los 1.500 metros”, señaló la atleta, quien firmó el sábado un tiempo de 2 minutos, 4 segundos y 13 centésimas en la distancia de su especialidad, en una competición organizada en Potchefstroom, ciudad universitaria al noroeste del país.

“Me siento mucho mejor y eso se debe a que corrro y gano carreras”, agregó Semenya, de 20 años.

La atleta sudafricana ya ganó tres carreras internacionales desde su regreso a la competición tras haber recibido el visto bueno de la IAAF para volver a las carreras el pasado verano (boreal).

Justo antes de correr en la final de los 800 metros del Mundial de Berlín, en la que ganó la sudafricana, se solicitó la intervención de los expertos médicos de la IAAF.

El caso de la corredora escandalizó en Sudáfrica, y llegó a alcanzar una dimensión política y racial en un país con un contexto muy particular debido a su liberación del apartheid, hace sólo 16 años.