El ‘nuevo Brasil’ de Mano Menezes afronta este miércoles un complicado amistoso ante Francia, frente a la que intentará demostrar que su apuesta por los jóvenes y por recuperar el ‘jogo bonito’ tiene base, tras la derrota en su último partido, ante Argentina en Qatar (1-0).

Un tanto de Lionel Messi en el descuento final del ‘Clásico’ de noviembre supuso la primera derrota con el nuevo entrenador y el primer tanto en contra, tras las victorias previas ante Estados Unidos (2-0), Irán (3-0) y Ucrania (2-0).

El revés ante el gran rival sudamericano ha frenado ligeramente la euforia en torno a la nueva etapa de la selección, que ha contado con el respaldo de la prensa por su intento de recuperar el tradicional ‘jogo bonito’ y el espíritu ofensivo, que había pasado a un segundo plano con Dunga.

“Creo que en cuatro partidos hemos avisado del potencial que tiene este equipo. Somos conscientes de que tenemos buenos jugadores, que pueden explotar en cualquier momento”, explicó Menezes tras el partido ante la albiceleste, quitando importancia al resultado y haciendo un buen balance.

Una derrota contra Francia desataría de nuevo las dudas acerca de la madurez del equipo, sobre todo ante la cercanía del próximo reto, la Copa América de Argentina (1-24 julio).

“Es una obligación para la selección brasileña (como defensora del título), incluso aunque sea en territorio argentino, donde las cosas son siempre mucho más difíciles”, estimó.

Para ello, el ex entrenador de Corinthians y Gremio intenta trabajar contrarreloj con un bloque joven y renovado casi por completo con respecto a la ‘era Dunga’, que terminó con fuertes críticas por la dolorosa eliminación en cuartos del Mundial-2010, ante Holanda (2-1).

En su primera lista, para un amistoso contra Estados Unidos en Nueva Jersey, Menezes sólo llamó a cuatro jugadores presentes en Sudáfrica (Dani Alves, Robinho, Ramires, Thiago Silva).

En su convocatoria para este amistoso contra Francia la cifra se ha elevado, con un total de siete ‘mundialistas’: los porteros Julio César y Gomes, los defensas Dani Alves, Luisao y Thiago Silva, el volante Ramires y el atacante Robinho.

El cambio con Menezes no ha llegado tanto con el esquema de juego, con una defensa sólida basada en Alves, Thiago Silva y David Luiz, con Ramires y Lucas como apoyo, y un ataque en el que sigue confianza en Robinho y Alexandre Pato, a pesar de que hasta ahora la conexión no ha funcionado como se esperaba.

Por el momento ha dejado de lado a la estrella Kaká, baja por lesión en la primera parte de la temporada con el Real Madrid y que reapareció en enero, aunque aún está corto de forma.

Es precisamente ahí, en la búsqueda de un ‘director de orquesta’, donde hasta ahora ha tenido más problemas. Para el amistoso en Francia ha llamado a dos nuevos que podrían asumir esa función, Jádson (Shakhtar) y Renato Augusto (Bayer Leverkusen).

En el ataque, una de sus apuestas personales, Neymar, no estará en París al encontrarse disputando el Sudamericano Sub-20 en Perú, donde la ‘Seleçao’ es segunda del grupo del hexagonal final.

“Muchos de los jugadores que están podrán ser aprovechados en el Mundial de 2014″, señaló Menezes en la web de la Confederación Brasileña (CBF), renovando, por si quedaban dudas, su confianza en los jóvenes talentos del país.