Un importante narcotraficante y jefe de los escuadrones paramilitares de ultraderecha, por el que Estados Unidos ofrece una recompensa de 2,5 millones de dólares, habría sido abatido en una operación de la Policía colombiana, aseguraron el martes a la AFP fuentes policiales.

“No está plenamente confirmado aún pero creemos que el narcotraficante Pedro Guerrero Castillo, alias ‘Cuchillo’, habría caído abatido en una operación de las policías Antinarcóticos y Dijín -policía judicial- en el oriente del país”, señaló a la AFP una alta fuente de la institución.

Según la fuente que requirió del anonimato, ‘Cuchillo’ -uno de los narcotraficantes más buscados por Washington- habría caído el domingo durante un combate entre las poblaciones de Mapiripán, en el departamento -provincia- de Meta y San José, capital de la de Guaviare, al oriente del país.

“Los combates iniciaron el sábado. Allí murieron dos policías y se capturó a ocho miembros de la banda de ‘Cuchillo’, entre ellos, Harold Humberto Rojas Piñeros alias ‘Loco Harold’, segundo de la organización. La operación se mantuvo y el domingo volvieron a darse los enfrentamientos”, añadió.

Según la fuente, al final del combate los agentes hallaron “el cadáver de un individuo cuyas características morfológicas son similares a las de Cuchillo”, pero -aclaró- “también tenemos dudas, por lo que decidimos enviar el cadáver a (al estatal instituto colombiano de) Medicina Legal”.

“Si llega a comprobarse que se trata de ‘Cuchillo’, el presidente de la República (Juan Manuel Santos) ofrecerá en la mañana del miércoles una rueda de prensa confirmando la noticia. Si no, se decidirá si la operación para perseguirlo continúa en la zona”, concluyó.

El cadáver fue trasladado a una base militar de la ciudad de Villavicencio, capital de Meta, donde el director general de la Policía, general Oscar Naranjo, aguarda el dictamen forense.

Según la justicia colombiana, Guerrero -jefe del frente Héroes del Guaviare del Bloque Centauros de las desmovilizadas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC)- es responsable de más de 2.000 asesinatos y desplazamientos en medio del conflicto que desde hace medio siglo padece la nación andina.