Hasta el inicio del próximo año se postergó una reunión entre el Concejo Municipal de Tomé con el Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, para conseguir cupos de empleo. El 27 de febrero resultó devastador para Tomé, con la pérdida total de alrededor de 3 mil puestos de trabajo.

Una situación que según el alcalde Eduardo Aguilera se palió en parte gracias a las plazas entregadas en el marco del Cuerpo Militar del Trabajo, que una vez terminados, bajó de mil a 230 personas de Chile Solidario con un empleo de emergencia, en contratos que terminan el 31 de diciembre.

El alcalde Eduardo Aguilera sentenció que la última medición entregada con alrededor del 11% de cesantía es mentirosa, dado que hay cifras municipales que aumentan la cifra a 16%.

Para el próximo año, la nueva distribución dejó a Tomé con las manos vacías y era lo que se pretendia exponer al Ministro de Hacienda en una reunión que a última hora se canceló desde la capital. La nueva fecha tentativa apunta al 3 ó 5 de enero.

Aguilera dejó entrever que el tema se ha manejado políticamente, dado que -a su juicio- el discurso unificador del Presidente no es respetado en espíritu por las autoridades locales.