Los 33 mineros atrapados en una mina en el norte de Chile “están muy contentos y muy bien de salud”, señaló Jean Romagnoli, uno de los médicos a cargo del operativo del rescate, luego de que este sábado una de las perforadoras llegara al lugar donde se encuentran.

“Están muy bien, muy contentos. Y sobre todo muy animosos”, dijo el médico deportólogo en conversación telefónica con la AFP.

“Hoy les hemos bajado los alimentos por la ‘paloma’ (un mecanismo que se desliza por los pequeños túneles que contactan a los mineros con la superficie). Ellos se encuentran súper bien de estado físico y muy bien de ánimo, que eso siempre ayuda”, añadió.

“Calculo que su salida será a partir del martes, pero hay que esperar a las decisiones que se tomen hoy (sábado)”, agregó sobre la fecha en que se concretará el rescate final del grupo, atrapado desde el 5 de agosto.

Las autoridades estudian si colocarán tubos de metal para revestir el hoyo que este sábado alcanzó a los mineros. Si se decide no hacerlo, el rescate podría desarrollarse en los próximos tres días o en caso contrario, en un máximo de ocho.

Se prevé que la decisión sea comunicada la tarde de este sábado, tras analizar las imágenes que tome una cámara que descenderá por el tubo.

“Hoy día comieron al almuerzo una dieta normal. Esta noche comerán carne al jugo con arroz”, contó Romagnoli. Unas horas antes de que sean izados “deberán hacer un ayuno”, añadió.

“Esta tarde prevemos además la llegada de monitores que nos ayudarán a controlar su estado físico durante el proceso de salida”, de cada minero que llevará cerca de una hora, dijo.

El médico aclaró además que “no tomarán sedantes ya que tienen que estar plenamente conscientes” durante el ascenso a la superficie.

“Una vez que se sepa cómo está el pozo, sabremos qué hacer”, señaló de su lado el asesor del ministerio del Interior Cristián Barra, antes del descenso de la cámara.