Algo avanzaba en el retorno a estas líneas sobre la irregularidad del campeonato, reflejada en lo que se vio en los partidos del fin de semana. Cotejos que si bien contribuyeron a estrechar la tabla de posiciones a partir de la emocionalidad con la que se disputaron -y terminaron- los diversos encuentros, mostraron poco fútbol asociado y elencos predecibles. Tan predecibles, que inclusive, tuvieron los mismos errores que han cometido a lo largo del certamen.
ANFP.cl
Los equipos de mayor convocatoria son los que se perfilan en la lucha por el título, aunque Audax Italiano presenta sus cartas credenciales para llegar a instancias importantes del torneo.
Vamos por partes. Decíamos que el gran partido de la jornada era el de Católica ante Audax. Un cotejo que cumplió con las expectativas desde lo emotivo (Audax ganando un partido con 9 jugadores, la carga desesperada de Universidad Católica y las pulsaciones a mil del público y los jugadores), pero para la UC, es una muestra de lo que viene haciendo en las últimas jornadas: los dirigidos por Juan Antonio Pizzi perdieron la brújula hace varias fechas, y nuevamente cuando tuvo la oportunidad de afirmarse en el liderato, se complicó (película repetida para los cruzados).
Es curioso lo de los franjeados, ya que teniendo hombres de gran experiencia y altura en defensa ha sido lo más débil en las últimas fechas (los últimos cuatro goles recibidos por Católica han sido por balones aéreos). Mientras que en el ataque tuvo oportunidades para marcar, pero no supo acertar (esto no es un tema de suerte, la que vale en los juegos de azar), pese a lo fino que está el “Pájaro” Roberto Gutiérrez, sin lugar a dudas lo mejor de los cruzados hoy por hoy, quien aporta calidad y presencia de verdad ofensiva, puesto que el conjunto de Pizzi asoma sin juego asociado. Mirosevic sólo llega con arrestos individuales, Pratto muy lejos del área, y Bottinelli aparece a cuentagotas y muy apagado.
En la vereda del frente, gran trabajo individual del Audax (Medel clave en los balones detenidos, Campos Toro en el lugar preciso en el momento justo, Herrera notable a la hora de parar los balones clave del juego), como también colectivo, al ordenarse defensivamente, sin ponerse colorado, cuando lo pide el partido. Hay que analizar a fondo a este equipo, y será en otra oportunidad.
A Colo Colo le costó un mundo imponerse a La Serena, que salió a plantear de igual a igual el pleito en La Portada. Sólo Millar aparece con mayor solidez en el centro del campo y Sebastián Toro hace lo propio en defensa. Por su parte, Arturo Sanhueza está bajo mínimos hace rato (pierde muchos balones y deja a contramano a la retaguardia alba). Lucas Wilchez y Macnelly Torres muestran pocas luces por partido, justamente lo que no necesita el once de Diego Cagna para tener el vuelo que esperan los hinchas, quienes notan demasiado la ausencia de Ezequiel Miralles, que deja la sensación de ser el gran -y único- factor de riesgo en el ataque popular.
Y Universidad de Chile cada semana peor. Pierde partido a partido todo el brillo que mostró en Copa Libertadores (pese a todos los sobresaltos que tuvo hasta llegar a semifinales, siempre tuvo una solución para sacar adelante las llaves).
Hoy hasta el “buque insignia” (tras la partida de Walter Montillo) Diego Rivarola no le alcanza. En las últimas jornadas le llegan y le marcan, en el medio se corre (mal) y no tiene fútbol porque no tiene armadores, no tiene manejo y carece de la profundidad y precisión para tener variantes. Son muchas individualidades que no entran en el sistema de su técnico, quien insiste en utilizar un punta (Ojo: es muy dificil jugar solo arriba, y el que no trabaja en la recuperación del balón, no puede jugar), pero salieron todos a callar al uruguayo Carlos Bueno, a quien casi se lo comen por decir la verdad. Edson Puch se quedó en Iquique, Guillermo Marino nada aporta, tampoco Emanuel Centurión, algo Diego Rivarola , aunque ya no es punta porque viene desde atrás, Gabriel y Eduardo Vargas juegan con mayor compromiso de volantes que de atacantes (aunque llegaron a la U como delanteros y Gabriel está en la banca) y Francisco Castro muy verde.
Párrafo marcado para Cobresal de Luis Musrri, que con gran sacrificio, buenos jugadores (Adrián Faúndez ha despuntado en las últimas jornadas), con muy poco público (sabida es la situación del campamento de El Salvador) y buen fútbol junto a San Felipe, que no renuncia a ganar juegue donde juegue, lo tiene de la mano de don Ivo está preocupado del campo internacional (quien lo iba a decir a estas alturas del año) son las gratas sorpresas de este segundo semestre, que promete seguir con la montaña rusa en las nueve fechas finales del campeonato.
