El Gobierno anunció refuerzos en las policías de la Región del Bío-Bío para enfrentar el término del estado de catástrofe y el respectivo control militar en la zona.

Lentamente se empiezan a diluir las aspiraciones de la Intendenta del Bío-Bío, Jacqueline Van Rysselberghe, para mantener presencia militar de seguridad en las cuatro provincias.

La autoridad insiste en que sus asesores jurídicos evalúan la posibilidad de mantener a los uniformados en las calles, a pesar del término del estado de excepción.

Sin embargo, ya se desplegaron las medidas ante la retirada de los militares y la Intendenta confirmó una cifra aún no especificada de refuerzos para Carabineros.

Las conversaciones también las sostuvo con la Policía de Investigaciones. La PDI ya se adelantó a las medidas y recibió, un contingente que mantienen en reserva, desde las regiones de Valparaíso, la Araucanía y Los Lagos.