Al menos 20 personas, en su mayoría insurgentes islamistas, murieron el martes en un masivo ataque con aviones teleguiados estadounidenses, en los bastiones de los talibanes y de Al Qaida en el noroeste de Pakistán, informaron el miércoles las autoridades locales.

En la noche, las misma fuentes habían informado de al menos 16 muertos.

Testigos y responsables administrativos o militares dijeron haber contado hasta diez de esos aviones y la explosión de al menos 18 misiles en un ataque concentrado el martes por la tarde durante casi una hora.

La operación estuvo dirigida contra los escondites y campos de entrenamiento de los insurgentes en las inmediaciones de Dattajel, zona extremadamente alejada y montañosa del distrito tribal de Waziristán del Norte, fronterizo con Afganistán.

“En la noche, los aldenados retiraron otros cuerpos de los escombros, al menos 20 personas murieron, en lo esencial insurgentes islamistas según nuestras informaciones”, afirmó a la AFP en Peshawar, capital de la provincia del noroeste, un alto responsable militar que pidió el anonimato.

Este balance fue confirmado a la AFP por responsables militares y administrativos locales, establecidos sobre la base de testimonios de los habitantes.

Pero los balances de los ataques en estas zonas alejadas y totalmente en manos de los talibanes paquistaníes aliados de Al Qaida son imposibles de verificar de fuentes independientes.

“Nunca en el pasado hubo ataques de esta amplitud, fue el más masivo” lanzado por “aviones teleguiados estadounidenses”, afirmó a la AFP el oficial superior de Peshawar.

En las últimas semanas, la CIA y el ejército estadounidense desplegados en Afganistán han intensificado considerablemente sus ataques con aviones teleguiados en las zonas tribales del noroeste de Pakistán.

Esta región está considerada por Washington como el principal santuario de Al Qaida y una importante base de retaguardia de los talibanes afganos, gracias al apoyo de los talibanes paquistaníes.