El Ministerio Público aplicó la medida cautelar de “arraigo nacional” a los padres de un menor de 4 años que resultó herido a bala en la cabeza.

Benjamín Muquillaza, de 4 años, jugaba en la noche del 23 de octubre pasado en el jardín de su casa cuando repentinamente recibió un impacto de bala en la cabeza y que milagrosamente no le provocó la muerte.

Según relató el fiscal Hernán Silva Sata, los padres del menor, Luis Muquillaza y Gianina Rivera, aseguraron que se trató de “una bala loca” pero este viernes fueron formalizados por obstrucción a la investigación, pues cobra fuerza la tesis de la Fiscalía que establece que el niño jugaba con un arma ilegal que estaba en el hogar.

En la audiencia, la defensa de los padres insistió en que el menor fue herido desde fuera del hogar e incluso el defensor Cristian Véliz sorprendió al asegurar que hay testigos que vieron a dos hombres huyendo, los que habrían intentado asaltar o robar en el domicilio.

Junto con considerar inverosímil la versión de la defensa, el fiscal Hernán Silva indicó que por ahora las pericias están orientadas a encontrar el arma con el que el menor fue herido, por ahora desaparecida.

En tanto, el Juzgado de Garantía de Villa Alemana acogió la petición de la Fiscalía de decretar medida cautelar de arraigo nacional para los padres del niño y fijar un plazo de investigación de 90 días.