El Gobierno desestimó las acusaciones de intervencionismo electoral en la Intendencia de Magallanes. A juicio de La Moneda, no proceden las acusaciones del comando del candidato Marco Enríquez-Ominami, ante la Contraloría Regional, de indagar eventuales presiones a los funcionarios por parte del intendente, Mario Maturana, con tal que apoyen la campaña del abanderado oficialista Eduardo Frei.

Según explicó la ministra secretaria general de Gobierno, Carolina Tohá, no hay denuncia fundada de intervención electoral en el requerimiento de los independientes, que busca, dijo, “hacer de un juicio político, una práctica de intervención”.

Tohá recalcó no se pide indagar el uso inadecuado de recursos del Estado y el tiempo de autoridades en campaña, según las acusaciones del comando en base a un artículo de prensa que habla de ultimátum a los funcionarios. Este reclamo liderado por un grupo de funcionarios PPD que se reservaron el derecho de no apoyar la postulación de Frei y de expresar su simpatía con la candidatura de Marco Enríquez-Ominami.

Mientras, el abanderado Eduardo Frei esquivó responder respecto estas acusaciones. La vocera de su comando, Paula Narváez, insistió que éstas sólo tratan de dañar la campaña del demócrata cristiano.

En ese sentido, La Moneda reiteró que descarta, por ahora, mandatar una investigación interna a la luz de los antecedentes, como fue el caso de las acusaciones en la Intendecia de O’Higgins.