El jefe de la Policía Metropolitana, Jorge ‘Fino’ Palacios, acusado de encubrimiento en la causa por el atentado a la mutual judía AMIA, presentó la renuncia al cargo, anunció este martes el alcalde de la capital argentina, el derechista Mauricio Macri.

“En un gesto de grandeza que ha tenido y que lo enaltece, Palacios presentó la renuncia, para no complicar la gestión de gobierno”, se lamentó Macri en una conferencia de prensa, en la que ratificó su respaldo al polémico ex policía.

El nombramiento de Palacios había sido rechazado por familiares de víctimas de la voladura de la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), con saldo de 85 muertos y 300 heridos en 1994, así como por organizaciones sociales, sindicales, estudiantiles y políticas opositoras de la ciudad.

La justicia argentina atribuye el ataque contra la AMIA a ex gobernantes iraníes, cuya captura internacional está solicitada, mientras que a nivel local investiga a sus encubridores.

Palacios, de 60 años, un especialista en investigar secuestros extorsivos, estuvo al frente de la Dirección Unidad Antiterrorista creada después del atentado a la AMIA.

Pero, en diciembre de 2008, el agente fue indagado por la Justicia por una presunta obstrucción de la investigación sobre un ciudadano sirio sospechoso por el ataque, en una causa en la que está imputado el ex presidente Carlos Menem (1989-1999).

“Hemos recibido la noticia (de la renuncia de Palacios) gratamente y esto disminuye la profunda preocupación comunitaria que existía”, dijo el titular de la AMIA, Guillermo Borger.

El ex comisario fue señalado además como partícipe en la represión de la revuelta popular del 19 y 20 de diciembre de 2001, que tumbó al gobierno conservador de Fernando de la Rúa (1999-2001) y que dejó 30 muertos, cinco de ellos en los alrededores de la Plaza de Mayo, en el centro porteño.

La Policía Metropolitana fue creada a instancias de Macri por la Legislatura (parlamento comunal) en octubre de 2008 y aspira a tener, a fines de 2009, unos 750 policías en la calles de Buenos Aires.

(AFP)