Amplia conmoción en redes sociales causó la fotografía de una perrita asfixiada por una cuerda alrededor de su cuello. El animalito colgaba desde las protecciones de una ventana de la casa de sus propios dueños, en la ciudad de Copiapó.

Con molestia, una vecina fotografió la penosa escena y se encargó de difundirla en internet. “Un infeliz que posiblemente pasó una feliz y sentida Navidad, dejó su perro amarrado a una cuerda de menos de un metro, a todo sol, sin agua ni comida“, decía en su perfil de Facebook.

“No sabemos cuántos días estuvo en esas condiciones. La vecina lo sintió aullar y miró por la pandereta y vio este espectáculo dantesco, el perro agonizando y nada pudieron hacer”, aseguró la vecina, cuya denuncia alcanzó una importante difusión en redes sociales.

La explicación

Al verse como blanco de agresivas críticas y hasta amenazas, los dueños de la perrita “Pascal” emitieron un comunicado público explicando lo ocurrido. Niegan que hubo una intención de hacerle daño, pero sí reconocen que la cuerda no era la correcta.

“Como familia queremos manifestar nuestro profundo dolor por la pérdida de nuestra mascota, la cual criamos y cuidamos cerca de un año hasta su triste muerte este domingo. Una pérdida que ocurrió por un accidente lamentable, como el que le podría pasar a cualquiera y con el que estamos profundamente dolidos. Nunca hubo voluntad de hacer daño, nunca“, aseguró la familia Ruíz-Herrera.

De acuerdo a su relato, la perrita fue amarrada mientras compraban elementos para reparar un portón dañado y por el cual podía escapar, arriesgando la seguridad de los vecinos. “Como nunca la habíamos amarrado utilizamos un cordel que probablemente no era el correcto, y ella al no tener la costumbre de estar en esta situación, buscó liberarse y finalmente murió por asfixia“, contó la familia.

“En ningún caso hemos sido, ni somos maltratadores de animales, esto fue un accidente absolutamente involuntario que nos duele en lo más íntimo de nuestro núcleo familiar, puesto que nuestra mascota Pascal era parte de la familia, y más allá de la condena por la que se nos culpa en redes sociales y medios, lo que más nos duele es perder a un ser que vimos crecer y era parte de nuestro hogar y que cuidamos responsablemente, incluso cuando nuestra casa estaba inhabitable producto del aluvión, y donde la trasladamos a casa de un familiar que la cuidó como es debido”, concluye el comunicado.

Imagen difundida en Facebook

Imagen difundida en Facebook