Desde que nació, el influencer británico Atholl Mills ha vivido con higroma quístico, una especie de protuberancia que se produce bajo la piel, debido a un problema con el sistema linfático del cuerpo.

“Eso afecta mi cabeza, oreja, mandíbula y cuello del lado izquierdo. También tengo una parálisis facial, causada por una cirugía que me hicieron cuando era más joven”, describió Mills en una columna del diario electrónico Metro.

Antes de los 8 años su apariencia no era algo que le preocupara. “Sabía que me veía diferente, pero no me importaba y mi familia siempre me había apoyado”, reconoció. Sin embargo, todo fue distinto cuando se enfrentó a los primeros comentarios de sus compañeros de escuela.

“Cuando un alumno nuevo me dijo que me veía muy raro y se burló de mí, algo cambió. Ahora estaba en sintonía con los comentarios de la gente en la calle, y hubo un cambio significativo en la forma en que pensaba sobre mí”, lamentó sobre esa etapa.

“Una vez que comencé a notar los comentarios y las miradas, empecé a desear lucir diferente. ‘Si está diciendo que me veo raro y feo, entonces debe ser verdad“, me dije. ‘Todos deben pensar eso"”, añadió.

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Throwback to when I was slightly cuter 💐

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Asimismo, la situación empeoró cuando notó que ninguna de las personas que aparecía en televisión se parecían a él. “Los hombres siempre tenían rostros perfectos y abdominales”, criticó.

Incluso en una ocasión expresó su intención de convertirse en actor en frente de sus compañeros. “Me dijeron que fuera realista ya que nadie como yo podía conseguir un trabajo así”, agregó.

Su autoestima también se vio afectada al ocultarle a sus padres que era homosexual. “Pasé toda mi adolescencia escondiéndome, temeroso de acumular más ‘pruebas’ que mostraran que yo era diferente a los demás”, agregó.

Decidió reconstruir su autoestima

“Cuando tenía 20 años, estaba en un tren lleno, cuando un grupo de hombres de mi edad hizo comentarios groseros y descarados sobre mi rostro. Me preguntaron por qué guardaba comida en mis mejillas y me dijeron que tenía una cara que solo una madre puede amar. Me quedé paralizado, incapaz de hablar, me superaban en número. Así que me senté y no dije nada“, recordó.

Aquella tarde Mills se fue a casa y lloró toda la noche. Sin embargo, supo que ese era el momento de hacer un cambio en su vida. “Decidí que ya era suficiente. A partir de ese día, fui construyendo mi confianza de forma lenta pero segura, centrándome en quién era yo por dentro y no en lo que los demás pensaban de mí”, reflexionó.

“Si estaba fuera de casa, me concentraría en con quién estaba y en lo que estaba haciendo, en lugar de ver si la gente me estaba mirando (…) También solía tomarme una foto todos los días y felicitarla, diciéndome cosas como: ‘esa chaqueta realmente te queda bien’. Eso me ayudó a sentirme mejor por mi apariencia“, reconoció.

Fue así como decidió incursionar en redes sociales y abrió un canal de YouTube donde comparte videos reaccionando a nuevos discos o compartiendo opiniones sobre la cultura pop. “Ahora puedo mostrar todos los aspectos de mi personalidad”, expresó.

Descubrí que mucha gente no me juzga por mi apariencia. Inevitablemente, mi desfiguración aparece en algunos videos: quiero mostrar que hay más en una persona que su rostro, para ayudar a otros que experimentan algo similar a mí“, destacó sobre uno de sus objetivos.

“Me encontré de nuevo”

“Por primera vez abracé mi rostro”, admitió Mills, reconociendo que aceptar quién era, le quitó un gran peso de encima. “No tenía nada que ocultar. Desde entonces, he sido mucho más feliz en la vida y dentro de mí“, precisó.

Cabe señalar que esa reconstrucción inició hace 7 años, y aunque ha sido un proceso lento, está muy orgulloso de sí mismo. “Cuando dejé de escuchar lo que otras personas decían, descubrí que tenía el potencial para amarme de verdad“, expresó.

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“You look really good in that jacket” or “your hair looks luscious today” are just some of the things I used to tell myself. Why? The answer to that question is because I had absolutely no confidence left. To friends and family I appeared fine but on the inside I was eating away at myself. But this method of complimenting myself helped me to take on every day at one point. For about a year I was so scared to leave my home unless I was accompanied by someone. This was over fears that everyone would be staring at me or that someone would say something to me that was about my disfigurement. Why did I do it? Sometimes you have to be your own hype man. All you have is yourself. You can have great friendships and a great family but when it comes down to it, only you have control over your own life and I had seriously lost control. This little step of giving myself compliments helped me face the day but it also helped me to improve my own opinion of myself which was at an all time low. Now I look back at how far I’ve come and I am so proud. But I do want to remind people that words do hurt. Saying something derogatory to someone in the street for a cheap laugh from your friends is not okay. You don’t know what that person has had to do to even leave the house and you don’t know how far your comments can set them back. Please, if you can be anything be kind. The world is already a dark enough place at the moment. #selfconfidence #bekind #cystichygroma #yourenotalone #changingfaces #facialpalsy #blogger #maleblogger

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“Me encontré de nuevo: el joven que había perdido hace tanto tiempo, al que no le importaba lo que pensaran los demás. Fue un gran alivio“, agregó sobre este importante cambio en su vida.

Finalmente el influencer reveló que trabaja en la organización benéfica Changing Facesla, dedicada a todas las personas que tienen una marca, cicatriz o afección que las hace lucir diferente. “Me ha ayudado a sentirme válido”, concluyó.